Me desperté temprano, lo vi dur miendo como un bebé, fui hasta la cocina para ver que podía hacer para él, siempre él era el que me atendía, era mi turno. Corte un poco de fruta, haciéndole diseño de formas, las náuseas volvieron así que el vómito se hizo presente. Mi garganta dolía, el ácido del vómito me estaba quemando, intenté recuperarme un poco, cada vez estoy más segura de que esté retraso puede ser un embarazo. Tengo miedo, es algo que en realidad no esperaba. Tomé un poco de agua para limpiar mi rostro, para luego ir a la habitación. Afortunadamente él seguía durmiendo, la tranquilidad que mostraba era contagiosa, me hice encima de él y lo desperté a punta de besos, ¿Quién se iba a imaginar qué podría ser tan romántica? El abrió los ojos y me da una cálida sonri