Capítulo 6
1215 Words
Un silencio que parecía ser eterno reino la habitación, ninguno de ellos dos habló, ni siquiera el niño.
Si se casaba por el hombre que estaba frente a ella había una gran posibilidad de que su padre se arrepintiera de haberla echado a ella y a su madre-Pensó Emily al ver la cara de su tía en la tableta.
Pero si aceptaba también tendría que cumplir con su papel de esposa-miro a Cristhian y luego negó-Eso es imposible, paso una vez y esa fue suficiente para no volverla a repetir.
La mañana después de acostarse con ese hombre su cuerpo dolió por unas dos semanas, incluso tuvo que irse a hacer chequeos por la incomodidad que le daba al caminar.
Había concluido que él era una bestia y casarse con él llevaría mucho sufrimiento por parte de ella.
-No me interesa-interrumpió por fin Emily el silencio.
-Esta bien, no insistiré, pero ya que no quieres hablar de matrimonio hablemos de la custodia del niño-Cristhian señalo a William-Pienso hacerme responsable de mis acciones.
-Puede que él sea tu hijo, pero no tienes derecho a quitarmelo-Emily se negó, jamás aceptaría ver cómo aquel hombre le quitaba su mayor tesoro.
-Ven aquí William-Christian se acomodó en su silla de cuero y cargo a William-¿Cuando quieres que tu madre y tu padre se casen?-El niño se alegró al escuchar esa pregunta.
-¿Puede ser hoy? Mientras mas rapido madre y padre se muden juntos mejor, luego podré tener una hermanita menor a la cual protegeré-Cristhian miró a William de manera orgullosa.
-Pues vamos a casarnos, a penas son las doce-los dos hombres se levantaron-Tengo un amigo que se volvió padre en una iglesia, él se puede encargar-Emily se quedó muda al escucharlos.
Eso era absurdo.
-¿Nos vamos a casar por la iglesia?-preguntó ella asustada.
-Si quieres podemos hacerlo por la ley, la esposa de un amigo es jueza, luego hacemos una gran ceremonia y nos casamos por la iglesia, Te sugiero que vayas buscando tu papeleo querida futura esposa, hoy nos casamos-Afirmó.
-¿Estás loco? Yo apenas te conozco-le gritó Emily para ver si le quedaba algo de conciencia.
-En mi familia solo te puedes casar con una mujer, y esa es la madre de tus hijos-Concluyó el.
Aquel hombre se veía serio hace un momento, incluso hasta daba miedo, pero mientras él hablaba de matrimonio en los ojos de Emily se veía algo tierno.
-Madre, vamos a buscar las cosas necesarias a casa, la abuela estará muy feliz cuando sepa que encontré a mi padre-El niño saltó de los brazos de su padre y salió por la puerta de la oficina.
-Vamos a casarnos, nuestro hijo necesita crecer en una familia completa-luego de decir aquellas palabras dejó sola a Emily.
No entendía lo que estaba pasando, ni mucho menos como pasó, pero en menos de lo que esperaba estaba sentada en frente a la oficina de asuntos civiles.
-No quiero-se negó y volvió a entrar al auto.
-Te llevaré cargada dentro si no sales por tu cuenta-le recordó Cristhian.
¿Cómo había llegado hasta allí?
Pregunta que ni ella ni nadie sabía responder.
-Vamos-Esta vez salió del auto decidida y entró al lugar.
Cristhian se burló luego de ver su comportamiento, ¿aquella era la mujer con la que se iba a casar?
Entró a la oficina y luego de hablar con la jueza que había mencionado anteriormente; le entregó una hoja a Emily.
-Solo debes firmar y estaremos casados.
¿Tan fácil?
¿Sin lágrimas?
-Listo-dijo luego de firmar.
-Estos son los anillos por estas semanas, los otros llegarán en unos días-una sortija de diamante se visualizaba en una cajita de cristal.
Era hermoso, grande, y muy costoso.
-¿Debo ponértelo yo?-Emily dudo en tomarlo pero al final lo hizo.
Cristhian hizo a un lado la cajita luego de tomar el anillo, cada uno con la mirada puesta en el otro intercambio su anillo.
-Puede besar a la novia caballero-La jueza los miro a ambos.
Cristhian sintió como el cuerpo de Emily se tensaba, Con una sonrisa se acercó a su rostro y luego de pensarlo varias veces, deposito un beso en la frente.
-Ahora eres mi esposa-le susurro al oído-No me hagas esperar tanto.
Emily no entendía lo que decía ¿Esperar tanto? ¿De qué hablaba?
Luego de unos minutos lo entendió y sus mejillas se pusieron rojas.
-¿Qué cosas absurdas estas diciendo?-Se alejó de él y salió corriendo hacia la salida.
Había mucha gente allí presente ¿Como se atrevió a decirle tales cosas?
-Tenemos que irnos a mi oficina-interrumpió Cristhian sus pensamientos.
-¿A qué?-preguntó ella curiosa.
-Te hice una promesa y planeo cumplirla al pie de la letra-la tomó de la mano y la llevo al auto.
Mientras el conducía Emily aún no salía de sus pensamientos.
Había llegado ayer a este país y ¿Ya estaba casada? ¿Con el padre de su hijo? Si aquello era un sueño, ojalá nadie la pudiera despertar jamás.
-Ya estamos aqui-se anunció y ella reaccionó.
Bajo del auto agarrada de la mano del hombre que ahora era su marido.
Camino hacia el ascensor de un gran edificio. Ahora entendía un poco lo que estaba pasando, estaba casada, se casó hace unos minutos y ahora volvería a enfrentar a su padre luego de mucho tiempo sin verlos.
-¿Estas lista?-ella asintió.
Las puertas del ascensor se abrieron revelando a un señor sentado en una silla y a una mujer elegante sentada en un escritorio.
-Señor, los señores están en la oficina esperándolo-Sindy la secretaria de Cristhian le informó de inmediato.
-Vamos-Cristhian sostuvo la mano de Emily pero ella negó.
-Aun no estoy lista, entraré en un rato, adelantate tu-Cristhian noto como su mano temblaba.
¿Su esposa estaba nerviosa? o ¿Tenía miedo?
Cristian la entendió y siguió su camino hacia la oficina.
-¿Emily? ¿Eres tú?-aquella voz la reconocía.
Era su ex-novio.
-Eres tu, por fin te veo-el la abrazo y ella corriendo salió de sus brazos.
-¿Qué quieres?-le pregunto en tono arrogante.
-Lo lamento, pero ire al punto, tu familia me saco hasta el último centavo que me quedaba, se que no quieres verme, si me das mil dólares prometo alejarme de tu familia y jamás aparecer en tu familia-se quedo estática.
¿Por qué decía eso de repente?
¿Qué diablos estaba diciendo?
-Pero tienes una hija con ella, dudo que puedas irte lejos-ella miro como se agachaba.
-La niña no es mía, no es mi sangre, ella me engaño. Se que te fue bien en el extranjero ¿Puedes darme los mil dólares? Ya no soporto a tu familia-le rogó de rodillas.
-Esta bien, te los daré-el junto sus manos agradecido-Emily sacó un par de billetes de su bolsillo y se lo tiró.
Jamás pensó ver como él lo tomaba con tanta necesidad.
-Se te cayo algo-Le dijo ella agachándose para estar a su altura.
Revisó en el suelo para ver si era verdad. Emely quien aún seguía sorprendida por sus acciones le susurro al oído.
-Tu dignidad…
¿Como la están pasando? Todo está pasando muy rápido, ufff
¿Que creen que pasara en el próximo capítulo?
Leo sus comentarios.
Los adora: Su loca autora.
- Writer
