[Jia]
—¿Cómo conseguiste mi número? —No puedo evitar sonar molesta.
En el pasado me hubiese muerto de amor por ese gesto e incluso lo hubiese atribuido a que el destino nos quería cerca, pero después de conocer varios lados que jamás vi en Naeem, ya no me importa en lo más mínimo lo que el destino tenga para ambos.
Después de recibir su mensaje sorpresa decidí no responder, apagué el teléfono y me obligué a dormir.
No funcionó.
Pasé toda la noche en vela, ya que la curiosidad de saber la razón de la actitud tan extraña del pelinegro no me dejaba descansar en paz. Me pregunté de nuevo como mil veces la razón por la que me engañó con mi mejor amiga. Me sentí insuficiente para él, como su hubiera sido un payaso en su vida, un florero, en fin... Como siempre, Naeem invadía mis pensamient
