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Silvia Punto de Vista Alex Hush, el padre de Gerard, no trabajaba en la empresa, pero eso no significaba que su presencia no se sintiera en la oficina. Estaba claro que sus hijos le tenían devoción, al igual que Margaret Hush. No conocía bien a Alex, pues solo lo había visto en la boda de Katy y Ronny en Tailandia, pero lo que pude comprobar en nuestro breve encuentro fue que era muy diferente a sus hijos. Seguía siendo alto, guapo y ancho, pero tenía una suavidad y dulzura que los otros chicos no tenían. Especialmente Gerard. La noticia del accidente de Alex se extendió rápido por el edificio, y la preocupación de todos se podía palpable. Yo estaba entre los que se preocupaban. Eso hizo que fuera difícil trabajar. Finalmente, me rendí y saqué mi teléfono para enviar un mensaje de texto