Después del entierro, fuimos a ver a greta pero no había despertado, los días sin comer, dormir le pasaron factura, solo quería un golpe para caer y eso paso, estuvimos a su lado tomando su mano y apretandola, palabras de aliento de que todo estaba bien que no tenía que preocuparse, que descansará lo que fuera necesario aunque por dentro estaba que quería huir lejos, no sabía qué hacer ahora, mi cabeza dolía de tanto pensar, de tanta carga que tenía, como el hermano mayor ahora estaba a cargo. -Ahora que voy hacer.....¿ Como voy guiarlos sin cometer un error? - Tres días sin despertar y yo sin poder dormir mas que para cuidar de greta, turnados con esteban por cualquier cosa, ese día volví a casa solo para darme un baño y organizar un poco hasta que un hombre llego, era el abogado del ab