Me hallaba sucumbida en la lectura de varios libros en la biblioteca. Pero no cualquier tipo de libros, libros de historia. No sabía muy bien lo que estaba buscando, pero sabía que cuando diese con algo lo sabré. Llevaba toda la mañana del domingo paseando entre estanterías y hasta ahora no he dado con algo que me de pistas de lo que pudo haber pasado durante estos últimos años en el mundo. Lo cierto es que me parece lógico no tener libros de ese tipo aquí ya que la única historia que se nos impartía en clase era de hace un siglo, mínimo. Me llevé unos 6 libros a una mesa para ojearlos, cuando me di cuenta que la encargada de la biblioteca me miraba de forma sospechosa, como si quisiese averiguar qué estoy tramando, pero no le hice caso. El primer libro que abrí era uno bastante fi