Seguía conduciendo, Alex está dormida, mientras yo pensaba, Andrea, fue quien causo todo esto, me separo de la única persona quien de verdad amaba, me dolía algo la mejilla por el golpe, aunque merecía cada golpe no dejaba de sentirme mal y enojada a la vez. De repente tenía la horrible necesidad de tomar venganza sobre esto, y aunque no es correcto no podía parar de pensar en ello. Lamentablemente soy ese tipo de persona que paga con la misma moneda, o incluso el doble de monedas. Decidí dejar de pensar en ello, y seguí conduciendo, luego de una hora, ya había llegado a casa de Alex, bajamos sus cosas de mi auto, y ella se acercó para besarme y darme un abrazo. - Te amo Elena. - Te amo Alex. Ella volvió a besarme y luego entro a su casa, subí a mi auto y conduje a mi casa. Llegue a lo