Después de recoger mis cosas, me fui con Luciano a su casa. Llegamos a casa de Luciano, su madre y hermana me recibieron con alergia a pesar de la rápida boda. —Estela— Hola, bienvenida! —Arlin— Michas gracias! —Estela— Ahora esta será tu casa. —Lucrecia— Que bueno es tenerte aquí, tu si que me caes bien. —Arlin— Muchas gracias a ambas. —Luciano— Vamos a nuestra habitación. —Arlin— Si, permiso. Luciano y yo fuimos a la habitación, no niego que me sentí incomoda, a pesar de querer vengarme de Luciano él no parecía ser una persona que me haría daño. —Luciano— Ahora somos esposos. —Arlin— Si, ahora somos esposos! Debemos de volver a la empresa. Por cierto adelántate, yo me iré más tarde, organizaré algunas cosas. —Luciano— Está bien amor ? —Arlin— Adiós. Después de Luciano irse