Capítulo 1
Soy Heisel tengo 16 años y vivo en la manada LightMoon, cada vez que digo esta oración las personas se alejan de mi o de cualquiera que sea de esta manada, todos temen al escuchar esa simple palabra, ¿La razón? Es por qué en ella habita el Diablo hecho persona, el monstruo, el ser más horrible y podrido que hayan conocido y sí, estoy hablando del Rey Alpha, es una persona tan hermosa (físicamente) como malvada, dicen las leyendas que tiene el alma podrida y a las personas que se le acercan terminan muertas.
Nunca me he topado con él, en todos mis años de vida y espero que siga siendo así, el solo pensar que él esté cerca mío me da terror, claramente no soy la única que piensa esto.
No podría decir que mi vida es perfecta porque nadie la tiene, pero la verdad es que amo la vida que se me fue dada, casi nunca discuto con mis padres, adoro a mi hermanito, tengo buenos amigos y gracias a la Diosa Luna nunca sufrir algún tipo de menosprecio por ser humana. Me encanta ir al instituto ya que todos nos llevamos bien, es el típico instituto donde hay porrista y chicos que juegan fútbol americano, donde el capitán del equipo y la porrista principal son mates, si, como en los libros, claro que con la diferencia que ninguno es infiel y no tratan mal a nadie, en realidad son muy agradables.
Quisiera que mi mate me ame y vivamos una de esas grandes historias de amor que me encantan leer, donde pasan obstáculos, pero aun así siempre están juntos y nunca se dejan de amar.
Soy Ethan tengo más de un siglo, no es necesario tantas presentaciones porque todos me conocen, algunos por matar a sus hijos, esposas, padres y nietos, otros por haber destruido sus manadas, solo porque quise o por golpearlos y humillarlos o simplemente por ser el Rey.
Tengo muchos hobbies cómo cazar, matar, castigar, doblegar, dominar, golpear, humillar, atemorizar, entre otros, lo se mis pasatiempos no son muy buenos que digamos, pero me gustan.
No he encontrado a mi Luna, llevamos tanto tiempo buscándola que perdimos las esperanzas y tiempo después le di el 50% del control de mi cuerpo, así que soy una bestia y me gusta serlo.
Y no, no me he vuelto así por no encontrar a mi mate, eso sería ridículo y estúpido de mi parte, yo siempre he sido así, se podría decir que desde muy pequeño he sido malo y cruel, perdí la cuenta de los niños que mate “jugando” pero la verdad es que amaba ver sus rostros agonizando de dolor, era simplemente magnifico, luego empezaron a sospechar y ya nadie dejaba salir a sus hijos de casa por miedo a que yo jugara con ellos, así pasaron muchos siglos, hasta que la idea de una mate vino a mí, todos pensaban que quería encontrarla para cambiar, pobres ilusos, solo la quería encontrar para saber cuánto tiempo mi lobo y yo duraríamos sin hacerle daño, pero al pasar aún más siglos ambos perdimos las esperanzas.