Omega

Capítulo 7

Un nervioso JiHun esperaba junto a un, igualmente nervioso Yoosuk. Ambos estaban sentados en unos cómodos sofás de cuero azul marino, contradiciendo las paredes pálidas entre blancas y grises.

El alfa fue el primero en levantarse cuando observó a Yejoon caminar hacia ellos con los resultados en las manos. JiHun le siguió tomando del borde de la chaqueta del mayor inconscientemente. Notando el gesto, Yoosuk sonrió con ternura al omega que miraba al frente mordiendo su labio inferior.

—Ya tengo los resultados —dijo mostrando una expresión cerrada, sin revelar nada y asustando un poco a los dos presentes por ello.

¿Acaso serían malas noticias?

—¿Qué es? —cuestionó Yoosuk—. Vamos, dime Yejoon... —pidió sofocado el alfa, en verdad deseaba que todo saliera bien, tanto para ayudar a JiHun como para cumplir su sueño.

Yejoon se tomó unos largos minutos exasperantes para los dos contrarios, ya que su rostro seguía escondiendo perfectamente cualquier emoción.

Luego, de un segundo a otro, sonrío abiertamente revelando hermosos hoyuelos en el proceso.

—De momento, felicidades. Todo está bien, JiHun podrá hacerse la inseminación en unos minutos más mientras preparamos la sala —informó sin poder ocultar la emoción en su voz, pues él también deseaba la felicidad de su amigo.

—Yoosuk hyung...

—JiHun-ah...

Sin poder contenerse, ambos se abrazaron llenos de felicidad desbordante. Yoosuk alzó a JiHun en sus brazos mientras lo giraba con una gran sonrisa y el omega se carcajeaba rebosando de felicidad por el alfa.

Yejoon observaba con ternura a los dos contrarios, ante la emocionante imagen, el pensamiento de que hacían la pareja perfecta se plantó en su cabeza y por medio segundo, deseó que su amigo hubiese conocido a JiHun antes que a Soomin.

—Bueno —dijo cuando ellos dejaron de girar—. JiHun, en unos minutos estará todo listo —informo volviendo a ser profesional—. ¿Desayunaste? ¿Almorzaste?

JiHun negó con su cabeza.

—Yo... Tenía revuelto el estómago en la mañana así que... No quise comer nada esta mañana y como hemos estado ocupados aquí haciéndome las pruebas tampoco he almorzado... ¿Es un problema? —pregunto preocupado.

—Por el contrario —sonrió—, eso es perfecto. Para hacer la inseminación tenías que mantener limpio de alimentos tu sistema, en la noche podrás comer algo liviano y ya mañana comerás normal —estiró su mano revolviendo los cabellos del menor y golpeado el hombro de su amigo quién mantenía una deslumbrante sonrisa—. Vuelvan en media hora más, tendré todo listo —aseguró alejándose.

—Vamos a buscar a tu hermano —dijo el alfa comenzando a caminar seguido del joven omega.

JiHun estaba tan contento, que infantilmente empezó a dar pequeños saltitos mientras caminaba, liberando su aroma de la felicidad que sentía. Observando, Yoosuk sonreía ante lo tierno que se apreciaba el omega. ¿Algo infantil? Sí, pero seguía siendo adorable.

Cuando JiHun tropezó, el mayor rápidamente se acercó tomándolo de la cintura. Algo avergonzado, el omega cerró sus ojos e inevitablemente inspiró profundamente el aroma del contrario al estar tan cerca.

—¿Estás bien? —preocupado se alejó para poder observarlo mejor, sin soltar su cintura.

—E-estoy bien... gracias —respondió avergonzado y un lindo sonrojo se posó en sus mejillas.

Yoosuk suspiró en alivio y dejó ir la cintura del menor.

Ambos retomaron el camino y JiHun dejó de saltar con miedo de volver a caer y hacer el ridículo. Sentía calor en su rostro, y lo más seguro era que sus mofletes seguían rojos como los tomates, también podía sentir todavía aquel fuerte brazo rodeando su cintura, su piel hormigueando satisfactoriamente ante el recuerdo.

Cuando salieron del edificio, los alfas que pasaban, se giraron a contemplar al menor atraídos por el exquisito aroma que desprendía JiHun.

JiHun se encogió asustado ante tanta atención repentina y se aterrorizó al no sentir sobre él el aroma de su hermano.

Yoosuk quien luchaba reteniendo el gruñido en su garganta, no le gustó para nada la forma en que aquellos desconocidos observaban a JiHun, como si fuera una deliciosa presa.

Instintivamente, JiHun se removió más cerca de Yoosuk intentando ocultarse, completamente asustado.

Eso fue todo lo que necesito el lobo de Yoosuk para soltar ese gruñido que se empeñaba en salir para ahuyentar a los alfas desconocidos. Con un brazo rodeó la cintura del menor, atrayéndolo más hacia él hasta tenerlo casi pegado a su pecho. JiHun se sintió tan protegido que siguió su instinto y ocultó su rostro en el cuello del mayor.

—Largo —gruñó el alfa.

Yoosuk volvió a gruñir cuando JiHun se estremeció de miedo, observó fríamente a los alfas que les rodeaban hasta que estos se alejaron al sentirse inferiores a él. Respirando profundamente, intentó calmarse ahora que no había personas acosándolos.

—Está bien JiHun... Ya se fueron pequeño... —susurro con voz grave, acariciando la espalda del menor.

Pero JiHun le ignoraba, se aferraba a aquello que lo hacía sentir protegido y seguro, casi parecía estar en un extraño trance.

El alfa de Yoosuk gritaba que protegiera al pequeño omega, y siguiendo su instinto, pasó un brazo detrás de las rodillas del menor y movió el otro en su espalda, alzándolo y atrayéndolo hacia él nuevamente. JiHun solo se removió más cerca cerrando sus ojos sintiendo como el alfa retomaba el camino.

Taewook abrió de más sus ojos asustado cuando lo observó a través de la puerta al alfa cargando a su amigo, rápidamente se acercó a ambos cuando el mayor cruzó la puerta giratoria.

Yoosuk intentó dejar al menor sobre el sofá de recepción pero al sentir que JiHun se había desmayado, el alfa no le quedó de otra más que sentarse acomodando el cuerpo inerte del menor sobre su regazo.

—¿Qué pasó? —preguntó preocupado, tocando la frente del omega.

—Cuando salíamos, unos alfas que pasaban fuera del edificio se enloquecieron un poco, por no decir mucho, con el aroma de JiHun y comenzaron a rodearnos. Les tuve que gruñir para alejarlos, ya que JiHun se estaba asustando y cuando logre que se fueran, él no me quería soltar... No sé qué le pasa —explicó angustiado mientras acariciaba una de las pequeñas manos del omega, esperando que volviera a abrir sus ojos.

—¡Jungho aquí! —señaló Taewook al joven alfa que regresaba del baño.

Al contemplar la escena, Jungho rápidamente trotó hacia ellos con el ceño fruncido, sin quitar la vista de su hermano.

—¿Qué sucedió? ¿Qué tiene? ¿Qué le hicieron? —interrogó mientras se arrodillaba y acariciando la cabeza de su hermano.

Arrugó su nariz al sentir el aroma del mayor en él y no su aroma.

—Unos alfas enloquecieron y querían acercarse a Hunie, Yoosuk los alejo y... No sé qué le sucede —explicó rápido Taewook.

—¿Recibió una buena o mala noticia? —cuestionó ya haciéndose una idea.

—Buena, podemos seguir con el procedimiento —respondió rápidamente Yoosuk, algo confundido.

—Gracias —exclamó repentinamente el joven alfa, logrando que Taewook y Yoosuk lo observaran confundido—. No es solo por mi problema por el cual dejo mi aroma en JiHun Hyung... Le dije que ambos nos presentamos muy jóvenes y que eso trajo consecuencias —el omega asintió.

Yoosuk lo observó algo confundido pero siguió en silencio, esperando.

—Me explicaste que su aroma te ayudaba a controlarte y de paso alejar a los alfas de él.

—Ya pero, no te dije que aquellos alfas que lo persiguieron desde los diez años causaron un pequeño trauma en JiHun hyung del cual no es muy consciente —reveló.

—Explícate —pidió preocupado el mayor y muy confundido.

¿Quién se presentaba a los diez años?

Viendo la situación en la que se encontraban, Jungho asintió con su cabeza.

—JiHun hyung despertó como omega a los diez años, con eso su aroma era tan llamativo que siempre estaba atrayendo a alfas y hasta a algunos betas. Papá tenía que estar siempre a su lado mientras que mamá le daba su aroma para apaciguar el de mi hermano... —explicó—. Hubo un período en el cual mamá murió y yo aún no me presentaba a pesar de tener los 10 años... Papá y yo estábamos todo el tiempo con mi Hyung... Pero un día papá se atrasó y unas alfas mayores estaban rodeando a mi hermano...

Taewook gimió aterrorizado ante aquella imagen.

—No recuerdo muy bien lo que sucedió... Pero parece que me presente como alfa y perdí el control, cuando desperté, JiHun hyung me estaba calmando con la ayuda de su aroma. Después de eso Hunie estaba bien... Puede estar con otras personas tanto alfas como betas con o sin mi aroma, pero si más de un alfa le rodea y no tiene mi aroma encima, entra como en una pequeña crisis y se aferra a aquel con quién se siente protegido, en este caso usted —señala a Yoosuk.

—¿La noticia tiene algo que ver? —pregunto Taewook.

—Las feromonas en su aroma son demasiado fuertes y eso es lo que hace su aroma tan atrayente, pero Hunie no las puede controlar —explicó—. Por lo tanto siempre que recibe una buena noticia o una mala las deja escapar sin darse cuenta —observa a Yoosuk—. Ahora Hyung seguirá aferrado a usted hasta que estemos en casa y yo lo calme.

—¡Dios! ¿Crees que le vendría bien comer algún dulce? —pregunto Taewook.

—Yejoon dijo que JiHun no podía comer nada debido a la inseminación y que solo después podría comer algo liviano hasta mañana —explicó el mayor—. Creo que será mejor decirle a Joon que mañana seguiremos con esto.

—No... —su voz fue débil y rota, apenas llegando a los oídos de los presentes.

—Hunie ¿estás bien? —susurro su hermano con una pequeña sonrisa.

JiHun sonrió algo débil, aferrándose al cuerpo de Yoosuk y aunque quisiera soltarse, su lobo no se lo permitía por miedo. Avergonzado por su comportamiento, intentó sentarse al lado del alfa al ver su posición pero no pudo evitar seguir aferrándose a su brazo.

—Ya estoy mejor Junnie, no te preocupes —respondió acariciando la cabeza del joven alfa.

Sonriendo un poco más, observo a Taewook que le miraba con los ojos brillosos.

—¿Estás seguro? —preguntó su amigo inclinándose al lado de su hermano.

—¿Por qué esas caras preocupadas? Ya les dije que estoy bien —reiteró—. Es más, Yoosuk hyung lo siento por las molestias que cause y sigo causando —se disculpó.

—Está bien pequeño, todos estábamos preocupados —respondió.

JiHun asintió con la cabeza y la recargó sin poder evitarlo sobre el hombro del mayor.

—Lo siento Hyung... Yo les conté algo de ti... —susurro Jungho.

—Está bien Junnie, estoy seguro de que ellos estaban preocupados y confundidos, era algo de lo que se iban a enterar tarde o temprano por ti o por mí si seguían a nuestro alrededor.

—¿Seguro de que estás bien, JiHun? Yoosuk dijo que podían seguir mañana —Taewook dijo tomando una mano del contrario.

—No, quiero seguir —insistió—. Estoy bien, solo lo lamento por Yoosuk Hyung por tener que soportarme... Pero tengo un extraño terror a alejarme... —explicó apenado, sus mejillas adquirieron un rosa pálido y los presentes sonrieron por ello.

El teléfono de recepción sonó y Taewook se alejó con una sonrisa más relajada ahora que su amigo estaba despierto y hablando normalmente.

—Yoosuk hyung... Yejoon hyung dice que ya está todo listo —informó luego de terminar la llamada.

El alfa asintió y observó al par de hermanos.

—Tiene que ir usted señor Yoosuk —pronunció Jungho—. Mi hermano no le soltará en un momento cercano —se burló el menor, apretando la mejilla del omega mientras se levantaba.

—Pero dijiste que tú querías estar presente —le recordó Yoosuk.

—Lo sé, pero hablo en serio cuando digo que no lo va a soltar —indicó y observó a JiHun—. Le estoy encargando a mi hermano solo porque me demostró que podía protegerlo allá afuera, si no hubiera seguido desconfiando de usted —anunció sorprendiendo a ambos contrarios.

—¡Jungho! —exclamó escandalizado el omega.

—¿Desconfiabas de mí? —preguntó no muy sorprendido el alfa.

Jungho asintió sincero—. No se lo tome personal pero, todo era demasiado bueno para ser verdad —contestó e ignoró la mirada de su hermano mayor—. Aunque con esto acaba de demostrar que puedo confiar un poco en usted porque ayudó a mi hermano —sonrió alejándose hasta Taewook, donde le comenzó a molestar para entretenerse.

—Me disculpo por el comportamiento y palabras de mi hermano —pronunció apenado JiHun.

—Está bien —aseguró quitándole importancia—. Puedo apreciar que se quieren mucho y realmente, más de una vez me han dicho las palabras de tu hermano —reveló—, solo lamento que me trate como de señor —bromeó levantándose del sofá.

—¡Yoosuk hyung, me lo cuida! —gritó el joven alfa, agitando su mano mientras ambos se retiraban.

—Creo que ya no —comentó JiHun ante la repentina confianza de su hermano.

Sonriendo el omega tomó la mano del mayor, acercando más su cuerpo a él. Yoosuk sonrió ante el contacto del menor mientras entraba al otro edificio. Ninguno realmente pensando en ello.

Yejoon alzó una ceja al contemplar a los dos tan unidos pero no dijo nada. Con una sonrisa los dirigió a la habitación especial donde tenía todos los implementos médicos que necesitaría para realizar el procedimiento.

—En este caso no es necesario que te quites toda la ropa JiHun, solo que te recuestes en la camilla y me muestres tu pancita —dijo el mayor, desinfectando sus manos y colocándose unos guantes quirúrgicos antes de alejarse cruzando la habitación.

—Uh... ¿Yoosuk hyung se puede quedar? —preguntó solo para estar seguro.

—Claro, no es un procedimiento difícil o riesgoso a decir verdad. Solo depende de ti —reveló aún de espaldas.

JiHun asintió con la cabeza y se acomodó en la camilla con la ayuda de Yoosuk, con una mano se aferró al alfa quien se posicionaba al lado sin soltarle.

Algo tímido, levantó su suéter junto a la delgada camiseta mostrando su piel aperlada, revelando su abdomen firme con sutiles abdominales apenas marcados. A Yoosuk le pareció tierno hasta aquello, la piel del menor se veía tan suave y plana que se veía tentado a tocarla.

"Ahí va a estar mi cachorro" pensó.

—Eso es... —dijo Yejoon volviendo al lado de ellos con un carrito y sus implementos médicos.

Tomando unas especies de pinzas tomó una pequeña esponja cuadrada húmeda, moviéndola sobre una parte en específico sobre el abdomen del omega.

—Es anestesia —informó—. La aguja es un poco gruesa para que el ovocito de Soomin ya fecundado y con el ADN de ambos pueda pasar sin problemas y plantarse en tu interior de manera natural —explicó.

El omega asintió con la cabeza y apretó su agarre de la mano del mayor mientras cerraba sus ojos, Yoosuk alzó su otra mano y apretó con ambas a la de JiHun en una forma de apoyo silencioso. A diferencia del menor, él observó atentamente el procedimiento.

Yejoon lo hizo rápido y sin dolor por fortuna de JiHun, quien soltó un suspiro de alivio cuando le dijeron que ya estaba listo.

—¿Eso es todo? —preguntó abriendo sus ojos.

—Si, no es tan aterrador ¿cierto? —preguntó con una pequeña sonrisa, tomando el carrito para volver a dejarlo al otro lado de la habitación.

JiHun negó con su cabeza, sonriendo.

—Bien, ahora veremos si se plantó bien —anunció volviendo a su lado, tomando un pequeño aparato entre su mano mientras apretaba botones en una pantalla—. Sentirás viscoso y helado en tu abdomen —advirtió vertiendo sobre él un gel en el abdomen del menor.

Lentamente, empezó a mover pequeña máquina que tenía entre su mano sobre su abdomen, siempre mirando la pantalla mientras buscaba cuidadosamente. JiHun y Yoosuk seguían la mirada de Yejoon con interés y curiosidad a pesar de no entender realmente lo que observaban, hasta que el alfa se detuvo en un lugar en específico, revelando una especie de mancha.

—¿Está todo bien? —preguntó Yoosuk, mirando a su amigo de forma expectante y luego la pantalla.

—Esta pequeña mancha —dijo apuntando con el dedo—, es el inicio del cachorro —explicó con una sonrisa, sacando la máquina y limpiando el abdomen del menor.

—Que chiquito... —murmuró maravillado el omega.

—Espera a verlo en dos semanas más, estará un poco más formado para entonces —sonrió amable Yejoon, ayudando a acomodar nuevamente el suéter y camiseta al menor—. Ya sabes que hacer por el resto de la tarde pequeño. Una cosa, ¿puedes venir mañana? —pidió.

—Yo... Tendría que revisar el horario donde trabajo —respondió—. ¿Por qué?

—Quiero que vengas nuevamente para darte una explicación de lo que va a suceder de ahora en adelante y lo que tienes o no que hacer —respondió—. No es algo urgente o muy necesario pero, me gustaría que estuvieras claro respecto a lo que te sucederá y responder si tienes alguna duda.

—De acuerdo... Veré si me dan permiso —respondió sentándose y levantándose de la camilla. Inmediatamente se aferró al brazo de Yoosuk.

Yejoon asintió observando a su amigo.

—Me aseguraré personalmente de que mañana venga —prometió Yoosuk antes de despedirse de su amigo.

—Pero...

—Hablaré con tu jefe para que te conceda el permiso, no te preocupes —interrumpió—. Así, mañana además de traerte cumpliré la parte de mi trato —explicó el alfa.

Eso realmente emocionó a JiHun que no pudo ocultar su sonrisa, mañana por fin acabaría el infierno de la deuda.

—Gracias.

Una tranquilidad se hizo presente que reconfortaba mucho al omega, pasando de abrazar el brazo del mayor a darle solo la mano. Yoosuk se sintió un poco decepcionado por eso, él quería seguir sintiendo al menor contra su cuerpo y no sabía por qué.

Afuera, Jungho esperaba a su hermano ya algo aburrido. El cielo lentamente se estaba tornando en un revoltijo de hermosos colores como naranjo, rosado y algo de azul. Pronto el sol se ocultaría y la luna saldría.

Yoosuk llegó al lado del joven alfa con una ligera sonrisa que Jungho correspondió de forma sincera antes de concentrarse en su hermano. JiHun le sonrió y alzó su mano libre para acariciar la mejilla lastimada .

—¿Te tomaste los medicamentos a la hora indicada? —cuestionó.

—Si Hunie, no te preocupes —sonrió—. Tu amigo Taewook cumplió su trabajo, incluso me molestó y engañó para dármelos. ¿Y tú? ¿Cómo les fue a los dos? —pregunto curioso.

—Bien, mi cachorro ya está aquí —posó con cariño su mano sobre el abdomen plano del omega.

—Eso es una noticia genial —sonrió—. Vamos hyung que ya es tarde y tengo hambre —dijo sacándole una risa a JiHun—. Adiós Yoosuk hyung... —se despidió y observó a su hermano mayor.

JiHun observó a Jungho y luego la mano del alfa que aún sostenía la suya. Yoosuk miró al pequeño omega comprendiendo que aún no deseaba alejarse.

—Yo los puedo llevar —se ofreció—. No tengo nada que hacer y seguramente Soomin no estará en la casa todavía. Mi auto está estacionado a la vuelta —añadió.

—Gracias —dijeron ambos hermanos luego de compartir una mirada y siguieron al mayor.

Una vez llegaron, Jungho observó emocionado el modelo del auto y cuando se subieron, quedó encantado por el estilo de música que tenía el alfa. JiHun sonreía alegre por su hermano que irradiaba felicidad y Yoosuk se reía por las ocurrencias del menor.

Todo era tan natural y familiar que era un poco extraño para los tres, pero se sentía tan bien que siguieron disfrutando del momento.

Luego de un momento, la calle cada vez se hizo más estrecha y solo algunos faroles alumbraban la oscura calle.

—Es aquí —señaló el omega.

Observando el edificio, el alfa percibió que el exterior del departamento no se veía en las mejores condiciones pero, estaba considerablemente mejor a los anteriores que habían pasado.

Yoosuk sonrió amable y se bajó junto a los hermanos.

—Gracias por todo Yoosuk hyung... —se despidió JiHun, agitando su pequeña mano mientras se alejaba con su hermano.

—Espera —retuvo tomando su muñeca. El omega le observó curioso—. ¿Mañana a qué hora empiezas a trabajar?

—A las diez con quince.

Cuando ya no los visualizo más, subió a su auto con una gran sonrisa en su rostro mientras conducía a su casa. Realmente quería compartir su alegría con su pareja, solo esperaba que esta ya se encontrara en la casa para cuando llegara.