Manuel Después del incidente del que nos salvaron David y Luz haciendo la escena más rara y menos entendible del mundo, ella me llamó por el móvil, días después, para darme la noticia de que la habían aceptado en el Royal Ballet School en Inglaterra y su emoción fue tan grande que no pude dejar de sonreír mientras me lo comentaba ya que estaba feliz de que estuviera cumpliendo su sueño, sin embargo, lo único malo de todo esto… tenía que irse al final del verano. ―¿Cómo? No entiendo ¿no se supone que debes terminar el bachillerato? ―Es diferente Manu, cuando te reclutan de viajar lo más pronto posible para acoplarte y unirte a las próximas puestas en escena, tendré tutores. Me quedo en silencio por un momento mientras veo la maleta vacía que ya debería estar llena para poderme ir a