Ha pasado una semana, mi madre sale poco de casa, pero es más por decisión propia, porque al día siguiente de enterarme de Damien, me contacte con un buen amigo que debía un favor, él no dudo en aceptar cuidar a mamá por mí, y desde entonces vive con nosotras, a primera vista es bastante intimidante, pero en realidad él es pura miel por dentro. - Buenos días ¿desayuno? – me pregunta Ryder cuando entro a la cocina, veo lo que sostiene y me consigo con unos hotcakes con unas frutas pegadas, y lleva puesto una camisa de botones blanca junto con un pantalón de tela, pero ahí no hay nada raro, normalmente viste elegante, el tema está en el delantal que lleva puesto, rosado y con las palabras “besa al cocinero” en blanco con corazones y unos labios, como dije, pura miel. - Buenos días, y no, p