Stefan saca la lasaña del horno y la deja en la encimera para que se enfriara. − Huele delicioso. – lo felicito Tras nuestro desagradable incidente, Stefan propuso preparar una lasaña. Son las 6:20 pm. Y la botella de Champán está a punto de acabarse. Stefan convenció al mensajero del edificio para que comprara otra botella de Cristal, dándole una propina exorbitante. Toma la botella y vierte el contenido que quedaba en ambas copas. − Un brindis. – dice sonriendo mientras alza su copa. – por mi escritora favorita. Dejo la copa sobre mis labios, recordando la conversación con mi editora… o ex editora, ya ni lo sé. − Salud. – digo suspirando antes de tomar el último trago de la primera botella. Tomo una fresa y la llevo directo a mi boca, me sonrojo al notar la mirada de Stefan sobre m