—¡Listo!. —Exclamó, su amiga volteó a verla cuando regresaba complacida hacia donde estaba ella. — Habla, me tienes nerviosa con tu forma tan intrigante de mirarme. — Expresó Alexa impaciente. —Mi prometido pondrá a la proxeneta fuera del alcance de Michael hasta que resuelvas confesarte. — Vio un atisbó de alivio en su rostro. —Ahora las dudas son mías, y deseo tu sinceridad en este instante Beatríz, ¿cómo siendo tu mejor amiga desconocía que estás comprometida?. — Dio la vuelta, intento evitarla, pero ya se le había escapado, que más daba...era mejor soltar la sopa, la sinceridad ante todo, más con Alexa. — En verdad es más un acuerdo, por mi culpa perdió su prometida y he decidido ayudarlo a no ser el hazme reír de toda Italia.— La observo con curiosidad, sabía que podía ser travie