Tal y como Richard me lo había pedido, no le había mencionado nada de lo sucedido a Vanessa. Al día siguiente Richard me había hecho el favor de llevarme a mi trabajo y también me ayudo a comprar una nueva batería para mi camioneta, él era muy bueno y amable conmigo que cada vez que me hacía un nuevo favor me sentía más comprometida en ayudarle en cualquier cosa cuando él lo necesitara, por ejemplo, el pastel para su esposa me estaba esforzando bastante para que el pastel quedara lo mejor posible y les gustara a ambos. Por otro lado, Max ya se había acostumbrado a este nuevo ambiente y pueblo, me había dicho que ya tenía una amiga y me sorprendí mucho cuando me dijo que su amiga era Gabriela, al parecer por la discapacidad de la niña no muchos niños se acercaban a ella, casi siempre pasa