Un Nadir con evidente sorpresa observaba atentamente a Sean. Las palabras no podían salir de su boca, por lo que su jefe se le adelantó.
- ¿Tienes algún problema con esto? - Se señaló a él y a Jade.
- Claro que sí - Las palabras salieron de su boca sin pensarlas - Necesito que la sueltes Sean.
- ¿Disculpa? - Frunció el ceño al no esperar esa respuesta de su parte - No pienso soltarla - Observó a Gabriel, quien se encontraba discutiendo con su novia - Deberías de ir a hablar con tu amigo.
- Lo haré cuando Jade venga conmigo - Sean hizo una mueca ante tanta insistencia de su parte.
- Jade se quedará conmigo, necesito saber si está bien.
La susodicha observaba la escena con evidente conflicto en su mente.
- Ve a hablar con Gabriel y Lily - Musitó seria - Ahorita
