Habían pasado alrededor de tres días desde que el castaño fue secuestrado por Kate, tres días desde que las manadas buscaban al beta, tres días desde que Derek sentía como su alma y cuerpo se partían en mil pedazos. Kate había hecho de todo con Stiles, lo torturó de todas las maneras posibles, su cuerpo temblaba y estaba lleno de heridas y sangre, su pulso era demasiado lento y su respiración iba cada vez más despacio. Sudaba sin parar por el acónito que había envenenado todo su cuerpo dejándolo completamente débil. Aquel día Kate había salido dejándolo sólo, por lo que había logrado escuchar los cazadores la necesitaban, iban a atacar a la manada y a los alfas. - Derek - susurró Stiles luchando por mantenerse consciente Unos minutos después la puerta fue abierta, Stiles ce