Pov Angie
No me resistí más y uní mis labios a los de Sami, el beso empezó lento, pero poco a poco se fue intensificando poco a poco, lamí los labios de Sami con mi lengua pidiendo permiso para que mi lengua pudiera jugar con la suya y ella aceptó, nuestras lenguas bailaban al mismo ritmo, abrase a Sami y acaricie su espalda de arriba hacia abajo, apreté su trasero y ella soltó un pequeño gemido, ¡No podría aguantar más! Necesitaba sentir a Sami y tenerla, quiero hacerla mía.
- ¡Sami ya no aguanto! Quiero hacerte mía, quiero acariciarte toda con mis manos — Le dije en un susurro en su oído y pude ver cómo se le erizó la piel.
- Angie... Yo bueno, pero ¡Se cuidadosa! Me da miedo esto, dicen que duele ¡Mucho! — Sami me dijo preocupada y eso era algo que me gustaba se ella, su inocencia y
