Después de derrotar a Xaren, los cuatro amigos se dirigieron hacia la ciudad de Willowdale, donde fueron recibidos como héroes. La gente los aclamaba, agradecida por su valentía y determinación.
Elian, Lirien, Sophia y Finn se sentían orgullosos de lo que habían logrado, pero sabían que aún había mucho trabajo por hacer. La región había sido devastada por la oscuridad, y era necesario reconstruirla.
Así que se pusieron a trabajar, ayudando a los aldeanos a reconstruir sus hogares y sus vidas. Elian y Lirien usaron sus habilidades para proteger a la gente de cualquier amenaza, mientras que Sophia y Finn ayudaban a los aldeanos a encontrar alimentos y recursos.
Mientras trabajaban, los cuatro amigos se dieron cuenta de que su amistad había crecido aún más fuerte. Habían pasado por tantas cosas juntos, y habían aprendido a confiar el uno en el otro.
Un día, mientras estaban trabajando en la reconstrucción de un pueblo, Aethera apareció ante ellos. "Estoy orgullosa de ustedes", dijo. "Han demostrado ser verdaderos héroes".
Elian y Lirien se sonrojaron, mientras que Sophia y Finn sonreían. "No hemos hecho nada que cualquier persona no haría", dijo Elian.
Aethera sonrió. "No, ustedes han demostrado algo especial. Han demostrado que la amistad y la valentía pueden conquistar cualquier obstáculo".
Y con eso, Aethera desapareció, dejando a los cuatro amigos con una sensación de orgullo y satisfacción. Sabían que habían hecho algo especial, y que su amistad había sido la clave de su éxito.