Edén . . Ya es casi media noche, Greco pidió a su chófer que me llevará a casa, de verdad no lo entiendo, es un hombre muy extraño, siempre tiene esa pinta de malvado y un gesto frío, pero me intriga, quisiera saber quién es en realidad. No puedo evitar sentirme mal porque es obvio que no le interesó de una forma que no sea s*x*al, cuando le pregunté quién era, pude ver su enojo, después de todo ¿porque habría de decirme algo? no somos nada. Me es extraño que, aunque pensé que sería aún más insistente con el asunto del sexo no fue así, al contrario, lo he visto evitarme y aunque eso debería tranquilizarme no es así. Al contrario, creo que me molesta que me ignore. —¡ash! ese hombre me hace perder la cabeza— Exclamo en voz baja —Llegamos señorita— dice Tom y bajo de la camione