CAPITULO 12
823 Words
- ¿Qué no haga qué? ¿Qué es lo que no quieres que haga? ¿Por qué te pone tan nerviosa tenerme cerca?
- ¿Puedes alejarte? Alguien nos puede ver ¡Por favor!
- No me importa si alguien nos ve…
- Pero, a mi sí.
Logre que se alejara un poco… de verdad que este hombre me estaba volviendo loca, tenia que buscar una manera de alejarlo de mí, no podía permitir una relación más allá de lo laboral con él.
…
MENSAJE
- Hola, señorita ¿Cómo te termino de ir en tú día? - Sabia de quien era ese mensaje, el chico con los ojitos de luna.
- ¡Bien! Un poco agotada, pero gracias al cielo ya estoy en mi habitación, fue un día largo…
- ¡Bueno! Espero que duermas bien, solo pasaba a saludar…
FIN DEL MENSAJE
- ¿Con quien te mensajeas?- Jung Kook había entrado a mi cuarto, no sé porque estos chicos no golpeaban la puerta ¿Creen que soy parte de ellos o qué?
- ¡Se toca antes de entrar!- Le dije rodeando los ojos…
- ¡Lo siento!- Me dijo alzando las dos manos como muestra de rendición…
- ¿Qué se te ofrece?
- Vine a ver si ya te ibas a dormir… sino para que jugaras conmigo video jugos, no tengo mucho sueño y los hyungs ya están dormidos.
- ¡Dile a Tae!
- ¿No me escuchaste verdad? Dije que todos están dormidos…
- ¡Esta bien! Pero solo un rato, mañana es otro día difícil y tenemos que madrugar… además estoy muy cansada.
- ¡Gracias!- Me dijo con una gran sonrisa mientras cerraba la puerta, me puse una bata de dormir y baje a jugar un rato con él, debía admitir que Jung Kook me caía muy bien, era el menor de todos, creo que por eso nos comenzamos a llevar bien, además después de la pesadilla de aquella noche, me ayudo mucho…
- ¿Qué hacen chicos a esta hora?- El líder del grupo nos descubrió cuando bajaba a tomar un poco de agua.
- ¡Hyungs! Solo una partida por favor… logre convencer a Tae Eul y sabes que eso no es nada fácil, siempre anda diciendo que no podemos ser amigos y bla… bla… - Le di un codazo para que se callara.
- ¡No se acuesten tan tarde! Y lo digo por ti Kookie, se que ahorita Tae Eul se cansa y se va a dormir, pero tú no…
Nam también me caía super bien, lo sentía como mi hermano mayor, sabía que no podía encariñarme con ninguno de estos chicos, pero si uno se pone a pensar eso es imposible cada uno tiene algo que lo caracteriza y te hace quererlos un poco cada día que los conoces más.
…
- ¡Otra vez haciendo ruido! Eres una niña muy mala… sabes lo que sucede cuando no obedeces ¿No?
- ¡No por favor! Otra vez no… me duele… ¡Mamá ayúdame por favor! Me hace daño…
- ¡Por mas que grites nadie vendrá a salvarte! Nunca podrás escapar de mi eso te lo aseguro…
- ¡Déjame! Quita tus sucias manos de encima… ¡No me toques!
- Si no te callas te voy a dar una bofetada… a ver si así haces silencio.
- ¡Quítate de encima! Hueles a alcohol.
- ¡Tae Eul despierta por favor!- Esa voz, esa voz la conocía muy bien… me levante de un solo brinco y me sorprendí al verlo ahí, esta vez no era Jung Kook, sino Hoseok, estaba sudando y mis manos me temblaban, había tenido otra maldita pesadilla, cada día se hacían mas fuertes, solo quería llora ¿Por qué no podía olvidar esos terribles momentos? Por mas que quisiera sacarlos de mi vida siempre me perseguían.
- ¡Lo siento!
- ¿Por qué te disculpas? Solo fue una pesadilla.
- ¿Qué haces aquí?
- Iba para el baño cuando escuche ruidos… así que toque la puerta y como no me abriste, entre… ¡Lo siento!
- ¡No te preocupes!- Tenía muchas ganas de llorar, aunque no se veía mucho, por la oscuridad de la habitación, lo único que iluminaba era la luz de la luna que entraba por la ventana, podía ver en su cara la preocupación.
- ¿Sufres mucho de pesadillas?
- Un poco…
- ¡Ya no pasa nada! Ya estoy aquí- Me acerco a su pecho y me rodeo con sus brazos y fue cuando no pude aguantar más y lo deje salir, eso que me estaba guardando lo deje salir todo, comencé a llorar como una niña chiquita en los brazos de su padre después de haber tenido una pesadilla, él solo me daba pequeñas palmaditas en la espalda, y realmente no hacia falta que dijera nada, el solo sentirlo ahí me fue suficiente.
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