La misma noche Miami Aron Más pudo mi curiosidad por conocer un poco más de esta mujer despampanante, que terminé accediendo a su invitación, aunque pensé que me invitaría al bar del casino, o tal vez a un restaurante lujoso de los que debe frecuentar, pero estuvo equivocado todo el tiempo, pues sin esperármelo me hizo seguirla a su suite, y ahora parezco un imbécil admirando la vista de la ciudad por el ventanal tratando de no sentirme tan intimidado, mientras me sirve un trago de su bar. Sin embargo, vuelven a mi mente las palabras de Travis, “Abre los ojos, y aprovecha la oportunidad de salir de la pobreza con Marcela” Quizás es hora de cerrar la puerta al pasado, de olvidar de una vez por todas a Gaby, porque seguro ella siguió adelante sin mí y me toca hacerlo por más que me duela,