—No te preocupes, yo limpio y guardo todo —anunció Aiden cuando contempló a Alan comenzar a reunir los trastes sucios en la mesa.
—¿No te molesta? —preguntó, observándolo—. Tengo un entrenador nuevo y está en periodo de prueba —expresó.
—Es lo menos que puedo hacer considerando que te tomas el tiempo para cocinarnos —resopló Aiden.
—Aunque el chico aún no ha bajado —expresó, observando instintivamente hacia las escaleras.
—Se ha dormido luego de que finalmente le bajara la fiebre —explicó—. No quise molestarlo considerando que vomitó un poco antes, pero le despertaré dentro de poco para que coma algo —aseguró.
—Es lo mejor, no es bueno que esté enfermo y no coma, mucho menos si está devolviendo la mayoría por el cachorro —expresó levantándose de la mesa—. Te dejo, nos vemos en la tard
