—¿Por qué has entrado sin tocar? — Alexis estaba furioso y nervioso, él no se imaginaba que Sophie iba aparecer en su habitación, y menos, vestida tan malditamente sexy. —Yo… yo… ¿Por qué has hecho eso Alexis? — Sophie no pudo evitar que su voz se escuchara dolida, y que de sus ojos salieran lágrimas, la tal Emily, sonreía con malicia desde su posición. Alexis vio dolor en los ojos de su esposa y se sintió miserable. —Emily, quieres hacer el favor de esperar en el baño — la chica lo miró sorprendida, pero obedientemente hizo caso, y con un andar muy sexy se encaminó al baño, pero antes de entrar se giró a Alexis que no atención le había puesto. —No tardes amor — Alex la miró enojado y con el ceño fruncido, sabía por dónde iba ella, pero por el momento no le dijo nada, en cuanto entró