A pesar de que Alexis pensó que no iba a poder dormir y descansar por todo lo que tenía en su cabeza, no fue así, ya que su cansancio pudo más y cuando abrió sus eran las 10 am, se sorprendió ver que era muy tarde para él pero se sentía muy descansado y con mucha hambre, por lo que decidió ir a darse un baño y bajar a desayunar, una vez en la cocina Teresa, su ama de llaves ya sabía que él estaría en la casa, por lo que no se sorprendió cuando lo vio entrar a la cocina con un pantalón de mezclilla sin camisa y descalzo. —Buenos días, señor Black. —Buenos días Teresa. —¿Lo mismo de siempre? —Sí, por favor. —En seguida. Teresa empezó a preparar el desayuno de Alexis, éste nervioso observaba el lugar en busca de su esposa que no se veía por ningún lado. —¿Dónde está la señora Bl