SU OBSESION SECRETA

4

Solo una bebida

Me abrí paso a través del mar de gente y finalmente encontré la amplia escalera y rápidamente subí los escalones, dirigiéndome hacia la habitación de Mack. He estado aquí tantas veces, era como mi segundo hogar, había estado alojándome aquí desde que tenía nueve años, así que es seguro decir que conocía el lugar.

De repente, escuché risas de mujeres y me quedé congelada en el lugar... mierda... no me di cuenta de que Stephanie también estaría aquí. Stephanie Moore... la otra "mejor amiga" de MacKenzie. Stephanie y MacKenzie se conocieron el año pasado en la universidad. Stephanie es básicamente la versión rubia de MacKenzie. ¿Lo cual haría pensar que nos llevamos bien, ¿verdad? Incorrecto... parece que me desprecia enormemente.

Respiré hondo, debatiendo si debería irme a casa ahora y cortar mis pérdidas cuando el sonido de alguien acercándose por detrás me hizo darme la vuelta.

Asher... ¿qué demonios, por qué estaba aquí ahora?

Se acercó hacia mí y retrocedí, presionando mi espalda contra la pared.

"Lo siento." Dije rápidamente... preguntándome por qué me disculpaba en primer lugar...

Él simplemente asintió con la cabeza y pasó por mi lado hacia la habitación de Carson, ni siquiera diciendo una palabra. Lo cual estaba bien para mí, porque seamos honestos... ¿qué hay que decir? No pude evitar mirar su espalda mientras él metía las manos en los bolsillos de sus jeans y se estiraba los hombros. Llevaba una camiseta negra ajustada que no dejaba mucho a la imaginación. Cada músculo estaba en exhibición mientras caminaba por el pasillo. ¿Olvidé mencionar que ahora debía medir al menos 6' 8"? Sí... definitivamente es un Dios.

El sonido de risas me trajo de vuelta a la realidad y supe que debía enfrentar esto. Estaba aquí por MacKenzie y Carson... no puedo dejar que Stephanie arruine eso para mí.

Respiré profundamente, tratando de calmarme mientras apoyaba la cabeza contra la pared, tratando de animarme. Puedes hacer esto... no he visto a MacKenzie en semanas y realmente la extrañé. Maldición... ¿por qué no me quedé en casa y esperé que Ronan estuviera en línea? Eso sonaba como la mejor opción ahora.

Me alejé de la pared, con los ojos cerrados cuando de repente choqué con un objeto sólido. Los abrí lentamente, mirando hacia arriba ya que ahora estaba cara a pecho con Asher.

"¿Todo bien?" Preguntó, mirándome con su mirada de acero.

Parpadeé hacia arriba, mis mejillas enrojeciendo mientras me invadía la vergüenza. Probablemente pensaba que era una especie rara. Tal vez ni siquiera recordaba quién era yo. Suprimí la risa que surgía de la mera idea.

"Sí, solo animándome a mí misma." Dije torpemente y él continuó mirándome, con las manos en los bolsillos mientras se alzaba encima de mí.

"Linda camiseta." Soltó, haciendo que mirara mi camiseta. Espera... ¿acaba de decir que le gusta mi camiseta? Eso era inusual... especialmente viniendo de Asher.

"Uh... gracias." Susurré, el aire volviéndose denso mientras lo miraba de nuevo.

Mis ojos avellana se clavaron en los suyos plateados, su mirada provoco un escalofrío que recorrió mi columna vertebral. Mi corazón empezó a latir de forma errática y mi estómago se retorció. En serio... ¿qué demonios está pasando esta noche? ¿No recordaba quién era yo? La última vez que lo vi fue hace algunos meses... tal vez no me reconocía.

"Soy yo... Emery, por cierto... amiga de MacKenzie." Las palabras salieron de mi boca apresuradamente, sin saber por qué las dije. Supongo que es difícil para mí creer que Aher McNeal hablaría conmigo tan dispuesto. Él simplemente me miró, confundido.

"Sé quién eres." Declaró con un tono frío, pareciendo ofendido por lo que dije.

"Oh... sí, claro. Solo no estaba segura si recordabas o algo así... mejor me voy... Mack está esperándome." Esto era tan incómodo... ¿por qué dije eso? Antes de que pudiera decir algo más, me di la vuelta rápidamente y caminé directamente hacia la puerta de MacKenzie, sin siquiera llamar mientras la abría y me deslizaba dentro.

"Oh... dios... ¡Em!" Mack chilló fuerte, asustándome mientras corría hacia mí y me abrazaba fuertemente.

"Santo cielo, Em... te ves increíble." Exclamó, retrocediendo y mirándome de arriba abajo, examinándome detenidamente.

"Te extrañé mucho." Suspiré, diciendo cada palabra con sinceridad mientras la abrazaba una vez más. Su dulce perfume floral me envolvía mientras miraba por encima de su hombro, viendo a Stephanie mirándonos con una expresión molesta en su hermoso rostro.

"También te extrañé. Ahora ven aquí y déjame prepararte." Sonrió con malicia, haciendo que parpadeara confundida.

"Pero... ya estoy lista." Miré mi atuendo, pensando que no me veía tan mal.

Entonces miré los atuendos de Mack y Stephanie, lo que llevaban puesto hizo que mis ojos se abrieran de par en par. Mack llevaba una falda corta de mezclilla blanca que llegaba hasta sus muslos y una blusa corta con cuello recto a lo largo de sus brazos, dejando sus hombros al descubierto. Llevaba unas sandalias con tiras y, por supuesto, completó el atuendo con un collar gargantilla negra que tenía un pequeño corazón plateado colgando de él, era deslumbrante como siempre. Stephanie llevaba un vestido strapless rosa claro con un tipo de pluma esponjosa en la parte superior. Sus largas piernas bronceadas estaban al descubierto para que todos las vieran y sus tacones rosas combinaban perfectamente. No había forma de que pudiera estar a la altura de ellas.

"Em, no puedes usar eso... en serio", intervino Stephanie, mirándome de reojo mientras se arreglaba su alta coleta y se contemplaba en el espejo.

"Vamos, Em, esta es tu primera fiesta. Debes vestirte bien, por favor. Especialmente con lo mucho que has trabajado... no podemos permitirte que ocultes este nuevo cuerpo curvilíneo". Mack me tomó de la mano, llevándome hacia su enorme vestidor. Hablo de ALGO ENORME, más grande que mi habitación en casa. Tiene una pared de zapatos, una pared de bolsos y bastidores llenos de ropa. Como ella es modelo a tiempo parcial, muchas veces ha podido llevarse a casa la ropa que se pone durante sus trabajos.

Esta será la primera vez que pueda siquiera usar algo de su vestuario... bueno, veremos. Mack usa una talla pequeña y yo definitivamente soy una mediana, con mi pecho lleno y mis curvas.

Tan pronto como entramos al vestidor, las luces se encendieron y la ansiedad me invadió... oh Dios... ¿por qué?

Ella empezó a buscar entre las perchas y sacó algunas prendas... dejé de lado las minifaldas de inmediato... de ninguna manera me vería bien con eso. Ni siquiera me depilé las piernas esta mañana.

Finalmente se decidió por unos vaqueros ajustados de cuero y una blusa de satén n***o con tirantes gruesos que caían por mis hombros.

Pasándomelos, me los puse rápidamente... sorprendentemente, me quedaban bien. Abroché los pantalones y me puse la blusa, lo que me obligó a quitarme el sujetador. Jadeé cuando me miré en el espejo... la mujer frente a mí era casi irreconocible... me veía sexy. Y no solo eso, me veía hermosa. La blusa de satén me quedaba perfecta, aunque mi escote se veía claramente más pronunciado de lo que me sentía cómoda, y los pantalones eran prácticamente una segunda piel. Me puse mis Converse y salí.

Tan pronto como Stephanie y Mack me vieron, juro que se les cayó la mandíbula.

"Dios mío, Em... ¡estás buenísima!", exclamó Mack emocionada, llevándome a su tocador mientras empezaba a aplicarme algún tipo de maquillaje en la cara.

"Quizás esta noche finalmente pierdas tu virginidad", intervino Stephanie, haciendo que me atragantara cuando la miré.

"Steph... dejémosla dar pasos pequeños. No queremos lanzarla a los tiburones... aún. Además, ya sabes que Carson estará patrullando", frunció el ceño Mack, sabiendo lo protector que es su hermano.

Mack en realidad tiene un enorme enamoramiento por Craig Stevens. Es uno de los compañeros de equipo de Carson y Asher. Ha estado queriendo salir con él desde hace casi un año y Carson lo ha detenido por completo... comprensible, por supuesto. No querría que uno de mis amigos durmiera con mi hermana... así que lo entiendo.

"De acuerdo, vámonos, tomemos un chupito antes de bajar", añadió Stephanie emocionada, sacando una botella de tequila de su bolso.

Me mordí el labio ansiosa, viendo cómo Stephanie le daba un trago a la botella y la tragaba rápidamente... sin reaccionar como si fuera un trago de agua. Se la pasó a Mack y ella también tomó un trago. Su reacción fue más un jadeo, frunciendo el ceño y haciendo un ruido de disgusto mientras miraba a Stephanie, quien simplemente encogió los hombros.

Ambas me miraron, la culpa creciendo en mí, recordando lo que le dije a mi papá. Nunca había bebido antes... sí, tal vez un sorbo o dos de la cerveza de mi tío... pero nada como esto. Aún somos menores de edad... si pasa algo, podrían meterme en un gran problema.

"Vamos, Em, solo una copa", dijo Mack con ojos de cachorrito apenados, mientras me pasaba la botella. Sus labios perfectamente glossados puchereando mientras parpadeaba sus pestañas hacia mí.

"De acuerdo, solo una", asentí, haciendo que ambas chicas aplaudieran felices.

Levanté la botella a mis labios, inclinándola hacia atrás mientras el líquido ámbar inundaba mi boca. Tuve que esforzarme por no escupirlo de inmediato. Tragué la bebida ardiente y empecé a toser de inmediato.

"¡Ah, eso estuvo horrible!" Jadeé, entregando la botella mientras Mack se reía.

De repente, escuché un pequeño sonido de mi teléfono. Caminé hacia mi bolso mientras el alcohol descendía y quemaba en mi estómago. El sabor era tan horrible que todavía tenía una mueca en la cara cuando agarré mi teléfono.

Mack comenzó a reproducir una canción en su altavoz Bluetooth mientras tomaban otro trago de la botella. Sacudí la cabeza sonriendo mientras miraba mi teléfono.

De papá: ¿Estás bien, bichito?

Mierda, olvidé por completo mandarle un mensaje a papá.

Para papá: Sí, todo bien, solo pasando el rato con Mack y Stephanie en su habitación.

De papá: De acuerdo, te quiero, chiquita. Llámame si necesitas algo.

Para papá: Yo también te quiero, y lo haré.

Estaba a punto de guardar mi teléfono cuando noté que tenía un mensaje en mi aplicación de chat que me conectaba con mis amigos de los juegos.

Ronan74: Oye, ¿cómo va tu noche?

Mierda... Ronan me envió un mensaje. Estaba preguntando cómo iba mi noche. No pude ocultar la enorme sonrisa cuando Mack bajó y se sentó a mi lado en la cama, echando un vistazo a mi teléfono.

"¿De qué te estás riendo?" Preguntó sospechosamente mientras miraba la pantalla.

"Oh... tu chico de los juegos". Ella rodó los ojos y suspiró.

"¿Qué? Es muy amable..." dije tímidamente, escribiendo una respuesta para él.

Katina: va bien, solo pasando el rato con mis amigos. Deseando estar en casa para poder conectarme al juego. Jaja.

"¿Qué tipo de chico de los videojuegos?" preguntó Stephanie mientras arreglaba su delineador de ojos en el espejo. Estaba siendo más amigable de lo habitual. La mayoría de las veces me ignora por completo.

"Oh, este chico que conoció en su juego de frikis del que está enamorada pero ni siquiera ha visto una foto." Mack dijo con una sonrisa burlona y yo no pude evitar fruncir el ceño hacia ella.

"Somos solo amigos..." ladré, tratando de pasar por alto eso. Aunque en realidad estaba enamorada perdidamente de él... más de lo que me gustaría admitir.

Ronan74: Vaya, ¿tan mal está?

Katina: No es mi ambiente habitual, mucha gente. Gente alta y atlética... jaja.

Ronan74: Suena horrible. La gente alta y atlética es lo peor.

Katina: Sí, no ayuda que todos ellos jueguen baloncesto. Tengo que buscar muchas cosas en Google solo para entender las conversaciones más simples.

Ronan74: jaja, bueno, tal vez mejore a lo largo de la noche. Estoy seguro de que una vez que la gente empiece a beber, la conversación cambiará.

Katina: Eso pensarías... pero todo lo que estos tipos tienen en mente son pelotas... muchas pelotas.

Me reí de mi propio chiste y de repente Mack me sacó de mi ensueño.

"Vamos, Em, estamos listas", dijo emocionada y asentí, mi cabeza ya se sentía confusa solo con esa bebida.

Las chicas rápidamente me hicieron tomar otra antes de salir por la puerta y decidí que definitivamente me quedaría a dormir y le envié un mensaje a mi papá, prometiéndole que sería responsable. Lo cual planeaba ser... dos tragos no deberían arruinar eso, ¿no?

Ronan74: Tal vez mantente alejada de esos chicos... suenan problemáticos.

Katina: Bueno, ojalá estuviera en el juego contigo en su lugar. Eso es mucho más divertido.

Vaya... eso fue bastante directo... wow. ¿Es esto lo que llaman coraje líquido? Porque, sinceramente... me siento increíble. Como si pudiera decir cualquier cosa y ni siquiera sentirme nerviosa por ello. Me puse a caminar por las escaleras y juraría que un silencio llenó la habitación. Todos los ojos estaban obviamente puestos en MacKenzie y Stephanie como siempre, yo solo bajé trotando, sin mirar alrededor mientras las seguía. Miré mi teléfono justo cuando sentí que vibraba.

Ronan74: ¿En serio? ¿Prefieres jugar conmigo?

Me mordí el labio, mirando sus palabras mientras seguía ciegamente a las chicas. Escuché algunos comentarios a los que ya estaba acostumbrada cada vez que MacKenzie entraba a una habitación llena de hombres.

"Wow, es muy atractiva", dijo un chico.

"Joder", agregó otro.

"Cállate antes de que nos metamos en problemas, sabes lo que dijo Carson", dijo otro chico entre dientes.

Simplemente los ignoré a partir de ese momento, siguiendo a Mack hacia la cocina.

Katina: Sí, realmente me gusta jugar contigo. Es una de las cosas que más espero estos días.

Vaya... Trixie estaría orgullosa. ¿Quién hubiera pensado que solo necesitaba un par de tragos de tequila para finalmente dar el paso?

"Aquí, toma este chupito de gelatina con nosotras", Mack me metió una pequeña copa de plástico en la mano mientras miraba su apariencia naranja y gelatinosa.

"¿Lo mastico?", pregunté frunciendo el ceño, y escuché una risa fuerte detrás de nosotros.

"No, Em, te lo tragas", de repente Ethan apareció de la nada, acercándose a mi lado mientras su mano mágicamente encontraba su camino alrededor de mis hombros de nuevo.

"Te he estado buscando por todas partes... por cierto, te ves jodidamente increíble", susurró contra mi oído, el olor a alcohol claramente en su aliento. Sus palabras hicieron que mis mejillas se ruborizaran al instante.

Stephanie y MacKenzie me miraron sorprendidas, preguntándose quién era este chico... lo que honestamente sabía probablemente tanto como ellas.

"Él es Ethan... me ayudó a llevar los refrescos", dije, esperando que eso fuera suficiente explicación para ellas.

"Mucho gusto, soy Stephanie... pero puedes llamarme Steph", Stephurr bromeo con sus pestañas revoloteando y su mano jugando con un mechón suelto de su cabello. Su juego de coqueteo claramente estaba en marcha. Ethan simplemente asintió y siguió mirándome, observando el chupito en mi mano.

"¿Por qué no lo hacemos juntos?" dijo, agarrando un chupito él mismo mientras parpadeaba, teniendo un mal presentimiento al respecto. Antes de que pudiera protestar, Mack chocó su copa contra la mía.

"¡Salud, perras!" gritó, haciendo que todos vitorearan y tomaran su chupito. Ethan me miró mientras deslizaba la copa de plástico de vuelta, tragándose la gelatina entera.

"Así, como si nada", guiñó un ojo y sonreí nerviosamente, sintiendo como si todos me estuvieran mirando. Incliné la copa hacia mis labios, dejándola caer en mi boca y tragándola entera. La textura era extraña mientras la sentía bajar por completo. Al menos el sabor era dulce.

Ethan agarró la copa y la reemplazó con otra más. De repente sentí algo detrás de mí, esa sensación de cosquilleo que sentí antes volvió cuando me giré ligeramente, mis ojos se encontraron con aquellos fríos ojos plateados. Tenía su teléfono en la mano y me miraba intensamente.

"Vamos, Em, uno más, y luego puedes enseñarme algunas cosas en la cancha", Ethan bromeó, haciendo que volviera la cabeza y me tomara rápidamente el chupito de gelatina.

La habitación estaba muy ruidosa, todos riendo y hablando. De repente, mi teléfono volvió a vibrar en mi mano.

Ronan74: Me parece que te estás divirtiendo.

Mi corazón se hundió..carajo..¿me perdí algo que él dijo y lo ignoré? La preocupación me llenó mientras rápidamente me apartaba del brazo de Ethan. Él me miró con ceño fruncido.

"Solo tengo que usar el baño muy rápido". Me miró a los ojos y asintió.

¿Qué estaba pasando..mi cabeza empezó a girar. Caminé rápidamente hacia el baño y vi la larga fila, así que decidí intentar tomar un poco de aire. De repente, me encontré con la mirada de Carson. Asher le susurraba algo al oído y Carson frunció el ceño. Tenía el brazo alrededor de una chica pelirroja y rápidamente se apartó de ella mientras se dirigía hacia mí.

Esto no iba bien...nada bien.