Su hermano le había indicado que tenía un caso de violencia familiar grave, Fernando le pidió ayuda a la psicóloga infantil, debido a que un niño también estaba siendo parte de esta violencia familiar. Irene ni siquiera se había podido acercar a Fernando, estaba preparando todo para su próximo caso.
Un comandante de la policía se acercó con la mujer al despacho del abogado, quien les indicó que tomaran asiento, pero solo lo hizo la mujer. El comandante de policía le indicó a la joven mujer que su hijo estaba siendo atendido por la psicóloga infantil del despacho, a lo que ella solo asintió tímidamente
-Buenos dias, soy Fernando Black, seré su abogado con respecto a su caso.
-Buenos días, yo… yo no tengo tanto dinero para pagarle a usted- comentó tímidamente, ese hombre era apuesto, no l
