Julián. —¿De verdad?. —jamás creí que iba a venir ella. —¿No quieres?. —negando pongo las manos en su cara con una sonrisa. —¿Es joda?. —roso mis labios sobre los de ella con muchas ganas, Dios, no le puedo tener más ganas a está mujer—. Quiero todo Lili... Quiero esto. —Tengo miedo. —apoyo mi frente en la de ella mientras intento de respirar porque siento que no puedo más. —Voy a ir despacio... No tengas miedo. Le empiezo a besar en el cuello, la mandíbula y la mejilla hasta que llego a sus labios, mis manos tienen vía libre sobre su cuerpo porque no puedo tenerlas quieta, es imposible en este momento. El beso empieza tierno hasta que ya no me puedo controlar, un poco mas la levanto del culo ya que estoy desesperado, ¿alguna vez me sentí así de desesperado?, ni siquiera en mi p