—¿P-puedes operarla mientras busco el dinero? No tengo derecho- —Tessa comenzó a negociar, sin embargo, fue rápidamente interrumpida antes de que pudiera terminar su oración. —Esto no funciona así, señorita —la doctora negó con la cabeza—. Casi todos los días tenía que lidiar con casos similares. Pero era simplemente imposible realizar la cirugía sin el pago. La cirugía se realizará tan pronto como pague. El estómago de Tessa se revolvió cuando el médico se fue. No tenía de dónde sacar dinero. De repente pensó en alguien que podría ayudarla. Él no era cualquiera. Pero un multimillonario que podría tener acceso a cualquier cosa en la ciudad, incluidos los mejores servicios de salud disponibles. Con gran expectación, sacó su teléfono y le escribió un mensaje, ya que sabía que llamarlo er