Mi padre, Bruce y mi madre charlaban animadamente en la cocina, abrió muy grande sus ojos cuando me vio bajar la escalera con los dos hermanos a mi lado.
__ ¿Puedo preguntar por qué diablos bajas con los hijos del alfa de tu habitación? __ Madre no estaba nada contenta.
Me sentí repentinamente expuesta, como si un foco de luz despiadado hubiera iluminado mis más profundos secretos. La pregunta directa de mi madre me hizo sentir como si estuviera desnuda ante todos, sin defensas ni excusas. Un nudo de frustración se formó en mi garganta mientras luchaba por encontrar las palabras adecuadas para explicarme. En ese momento, anhelaba poder desaparecer, escapar de la tensión palpable que colmaba la habitación. Pero, en medio de mi incomodidad, una determinación silenciosa comenzó a crecer d
