El Legado Familiar

Capítulo 4

Al tener la cabeza mirando hacia abajo, mis ojos estaban puestos en la cebolla, y mi pelo me estaba estorbando en la cara, ya que mis manos estaban ocupadas y mis dedos solo olían a cebollas no podía recoger mi pelo, estaba de espaldas a las escaleras y sentí unos pasos muy lentos, era Angel, tomó mi pelo y lo puso detrás de mi oreja, me asusté y lo miré fijamente

—Me asustaste—

—Perdón por eso, solo quería sorprenderte y ayudarte con tu pelo —

—No es nada, gracias por ayudar ¿tienes hambre? —

— Si mucha, espero que lo que cocinaste sepa tan rico como huele —

—¿Estas dudando de mis artes culinarias—

—Espera, espera, déjame firmar mi testamento antes de morir envenenado —

—Jajajaja.. No seas tonto, te juro que es lo mejor que probarás—

—Bien Aby, confío en ti—

Serví la mesa, y nos sentamos a degustar unas pechugas a la crema con vegetales, la verdad estaba todo muy rico aunque el tonto de Angel estaba haciendo caras ridículas

—¿Que? Dime la verdad por favor ¿Está o no rica la cena? Dime la verdad, te juro que no me molestaré—

—Solo bromeo, te quedó todo muy rico, gracias por hacerme sentir como en casa otra vez, tenía mucho tiempo que no me sentaba a la mesa con alguien más —

—¿Enserió? —

—Si, mi trabajo no me permite durar mucho tiempo en un mismo lugar, por tal razón, no puedo comer con personas normales, por lo regular suelo comer comida rápida, es para lo que me da el tiempo —

—Que triste suena eso—

—¿Te estas burlando —

—No, no, jamás harías eso, es broma, pero ya hablando enserio, deberías de tener una mejor alimentación ya que trabajas mucho y el no comer adecuadamente te puede dañar el estómago —

—Entendido doctora, trataré de comer dentro de lo normal ¿Quieres una copa de vino? —

—Si, pero antes déjame recoger la mesa y pues ducharme ¿Crees que puedas prestarme algo para dormir? Es que no traje nada —

—Si, claro, en la habitación que está arriba a mano derecha, ahí puedes ducharte y tomar lo que gustes del vestidor, te espero en la terraza —

—Gracias, dame solo unos minutos, ya vengo —

—Aquí espero hermosa Aby —

Subí y antes de abrir la puerta de la habitación que Angel me había dicho me percaté que al fondo del pasillo había una puerta, misma picó mi curiosidad y decidí caminar hasta ella, cuando estaba a punto de abrirla Angel me interrumpió

—Aby ¿Qué haces ahí? No debes abrir esa puerta —

—Lo siento, no quería incomodarte, solo la vi y llamó mi atención, descuida no lo volveré hacer —

La manera en que Angel me habló era tan distinta a la forma en que me estaba hablando hace unos minutos en la mesa, era como que el Angel de ahora no es el mismo de allá abajo ¿Qué le pasa a este sujeto?

—No Aby, discúlpame tu a mi, no quería asustarte es solo que esa habitación es sagrada para mi, porque pertenece a mis padres y pues como entenderás no quiero que sus cosas sean tocadas —

—No tenia intención de tocar nada, pero bueno ¿sabes que? Mejor me voy a dormir dejemos lo del vino para otro día, descansa Angel y discúlpame nuevamente —

—Perdón, pero tienes razón, lo mejor es que nos vayamos a dormir, descansa Aby—

¿Pero que sucede con este tipo? Su rostro cambió por completo, hasta miedo me causó, ahora siento una gran curiosidad por saber que es lo que oculta Angel en esa habitación.

Entré a la habitación y cuando procedía a desvestirme para irme a la ducha empecé a sentir una presión muy fuerte en mi pecho como si mi corazón quisiera explotar, me agarré el pecho muy fuerte y caí al suelo de rodillas, la presión era tan fuerte que tuve que tirar un grito muy fuerte para liberar un poco el dolor, en esos momentos perdí el conocimiento…

—Aby, Aby ¿Estas bien? —

—¿Qué me pasó? No me siento nada bien, me cuesta respirar —

—Solo escuché un grito que provenía de tu habitación y pensé que algo malo te pasó, entré y te vi ahí, tirada en el piso, quería llamar a la ambulancia pero tu misma me pediste que no lo hiciera ¿Qué te pasó? ¿Recuerdas algo? —

—No sé qué me pasó, la verdad no recuerdo nada, tampoco recuerdo que te dijera que no llamaras a la ambulancia, estoy muy confundida ¿puedes llevarme al hospital por favor? —

—Como quieras, ven, déjame tomarte de las manos para que no vuelvas a caer—

Nos fuimos hasta emergencias, pero era extraño porque ya no me sentía mal, los doctores me mandaron a hacer estudios, y lo más raro de todo es que estaba todo perfecto, mi tensión arterial estaba intacta, mis glóbulos perfectos, y mi corazón como el de un bebé, ¿me estaré volviendo loca? ¿O será que esto es producto de lo que soy? “una bruja”

Cuenta Ángel…

Me quedé en la sala esperando a que Aby regresara para tomarnos unas cuantas copas de vino y de pronto sentí la inquietud de subir a mi habitación y fue justo ahí cuando vi que Aby estaba a punto de entrar a la habitación, esa habitación que es la clave del legado familiar, la detuve y en ningún momento noté nada raro en ella hasta que tiró el grito, fue justo ahí cuando descubrí que esa mujer, esa chica que me enloqueció desde que la vi es una bruja.

La habitación donde esta se estaba quedando es la habitación que utilizo para quitarle los poderes a esas malditas escorias, si mi familia supiera que dejé entrar a esa bruja a nuestro hogar sagrado estoy perdido, debo acabar con Aby, es lo que hago, es mi legado.

Cuando la encontré tirada en el piso lo primero que pasó por mi mente fue acabar con ella, lo intenté y fallé, algo tiene esta mujer que me hace dudar de lo que debo hacer, debo pensar como decirle a papá que encontré una joya, que tengo en mis manos una de las brujas más poderosas de la historia.

Volviendo a Aby…

Todo fue sorpresa para mi, pensé que el resultado de los médicos sería desafortunado pero fue todo lo contrario, no hay dudas de que este maldito don estuvo a punto de matarme. No sé cómo ni cuándo pero renunciaré a este maldito legado.