— ¿Qué pasa? — me pregunta mi novio, completamente serio. — Nada— miro hacia atrás y mi jefe no salió de su oficina Cobarde. — ¿Segura? — me mira fijo. — Sí, Príncipe… vámonos— le doy un beso rápidamente sobre sus labios y lo tomo firme del brazo para salir de ahí. Chase mira para atrás y sé que no me cree que nada pasó, pero lo que menos quiero es que tengan un enfrentamiento y mucho menos que sea cuando ya todos los trabajadores se han ido… honestamente no quiero que Chase vaya a tener problemas por defenderme de Damian, en el territorio de este. Vamos en el ascensor y no me quita los ojos de encima. Aunque intento parecer relajada y despreocupada, no lo logro. Llegamos al auto donde Jonathan nos abre la puerta y después se sube para arrancar. No puedo d