Capítulo 4

1801 Words
Peter POV Van a dar las doce del día y mi bebé ya está vestida lo menos provocativa posible (le puse una pijama de unicornio holgada), pero es imposible que no la vea, su rostro es perfecto y aunque le ponga un costal de papas como vestido siempre se va a ver como una princesa. -¿Papi por qué Kassandra está en la casa?-Hace una mueca y se cruza de brazos, se lo que prometí pero por hoy necesito que nos ayude. -Muñeca, solo será por hoy. Tenemos visitas y es necesario que este, la señora Navarro no puede con todo sola- Enseguida hace un puchero y rueda sus ojos- Si sigues portándote así tendré que castigarte, y si lloraste con el primero no podrás soportar este- digo susurrando en su oído y aprieto su muslo. -Lo siento papi-enseguida besa mi mejilla, me encanta cuando hace eso y lo sabe. Tocan el timbre, seguro es este imbécil, es mi amigo, aunque no me guste reconocerlo me parezco mucho a él, me encantan las mujeres y me gustaba salir de fiesta para cazar nuevas chicas, aunque con ninguna me sentí como me siento con Nina, es raro como una persona puede cambiar tanto tu vida. En fin ahora que tengo novia no quiero que se le acerque, se lo pervertido que puede ser, lo sé porque tengo años de conocerlo.  -Muñeca, antes que nada te quiero decir que no te acerques ni te quedes a solas con él, no es una persona muy agradable Enseguida paso Matthew a la sala, tenía una maleta y se veía un poco agotado. Nina POV No se la razón por la cual mi papi no quiera que me acerque al señor Matthew, es muy atento, no se ve tan malo como Papi dice, es blanco y su cabello es muy claro, su sonrisa es linda, se nota que es mucho más alto que yo, también es muy delgado. -Está hermosa criatura ¿Es real?-se acerca a mí y se inca me inspecciona de pies a cabeza y volteó a ver a mi papi, tiene sus puños apretados y su mandíbula inferior también- ¿Cómo te llamas encanto? -Mi nombre es Nina... -Matthew, te recuerdo que estoy aquí- interrumpe mi papi al señor de los ojos claros- creí que llegarías más tarde. -Mi vuelo fue más rápido de lo que pensaba, pero ya estoy aquí, completamente embobado en esta hermosa joven-me ve directamente y se sienta en el mueble que está frente a nosotros. -Sí, yo estaba igual la primera vez que la vi, soy muy afortunado de tenerle como novia-mis ojos se abren como platos, ¿Escuché bien?- es toda mía. -Ojalá algún día me encuentre a una chica tan linda, no dudaría ni un segundo en querer algo serio con ella. -Señor Steele, la comida está lista, pueden pasar a la mesa-interrumpe la tonta de Kassandra quien me ve con una sonrisa triunfante por lo sucedido ayer... Estoy muy molesta por eso, se supone que ella se iría. Después de comer, mi papi de nuevo me lleva a la sala y me da mi biberón con yogur natural, desafortunadamente mi favorito se había terminado, este día no puede ir peor. -Veo que es muy joven para ti esta pequeña, Peter- dice viéndome comer- tiene tal vez 18 años. -Sí, bueno eso no es muy importante... -Tomando en cuenta que tienes 29 años si es algo de diferencia. -Bueno, no es como decir que tú eres mucho más joven, tienes 26. El señor Matthew se queda callado pero un ruido de la cocina interrumpe el silencio, enseguida Papi se levanta y me deja sola con el hombre que no me ha quitado los ojos de encima. -¿Te puedo dar de comer?-se empieza a acercar a mí y toma la mamila de la mesa-vamos bombón, solo un poco. La verdad tengo mucha hambre y dejó que me cargue poniéndome en su regazo y me da mi comida, pero cuando volteo me molesta mucho lo que veo, mi papi está curando a Kassandra, al parecer se clavó algunos cristales, ella le agradece y lo abraza, el corresponde con un brazo pero enseguida se despega y se va de nuevo a la cocina. Eso me ha molestado tanto que enredo mis dedos entre el cabello del señor Matthew y parpadeo varias veces como le hago a mi papi, sé que eso lo pierde así que espero que sirva también con este tipo. -Eres una niña muy bonita, si fueras mi bebé nunca te dejaría de abrazar- para su mano por mi mejilla y mi papi me jala muy fuerte del brazo haciendo que me pare. -Creí haber sido muy claro con que es mi novia- aprieta más fuerte mi muñeca, esto duele mucho- ¿Te quedó alguna duda?-dice dirigiéndose al hombre. -Todo lo mal interpretaste, solo le quería dar de comer, ya estaba hambrienta. -A ti eso que no te importe, fuera de mi casa ¡Ahora! No termina de decir eso y se da la media vuelta, me jala hasta su cuarto, me está dando miedo, él nunca se había portado tan agresivo conmigo, quiero a mi papi tierno de nuevo. -Has sido una gata muy mala- me tira a la cama y cierra la puerta con llave- te dije que no te quería cerca de él y mucho menos a solas, tú eres solo mía-se acerca y comienza a quitarme mi pijama de unicornio sin ninguna delicadeza, solo estaba usando unas bragas muy pequeñas pues no le gusta que ocupe sujetador, cuando me siento casi desnuda pongo mis brazos frente a mis pechos- Quita tus brazos, jamás te debes de tapar cuando yo te esté viendo-quita mis brazos y yo volteo hacia otro lado- ponte en cuatro- sigo sin poder reaccionar y solo lo veo- Te estoy diciendo algo y espero que me hagas caso- pega una nalgada muy fuerte y grito, se me salen algunas lágrimas pero me pongo en la posición que él quiere. - ¡Esto es muy injusto, tú dijiste que Kassandra no vendría y aquí sigue, pero el señor Matthew solo estaba siendo amable y te enoja! -Dije muy claro que me tienes que hacer caso en todo lo que te diga ¡me desobedeciste!, espero que con lo que estoy por hacer te quede claro quién es tu Papi, te vas a quedar en ese misma posición. Él se va y yo volteo para darme cuenta que tiene una caja en sus manos, saca unas cosas y todas son color rosado, ninguna se me hacía familiar pero no tenían un aspecto muy agradable. No me dice nada más y toma una cosa que parece una colita de gato, tiene algo plateado al inicio. Saca algo parecido a un aceite y lo vierte por su dedo índice.  -Te voy a tapar los ojos, sé que no estás muy acostumbrada a esto pero esto no estaría pasando si no fueras tan mala niña- Pone un antifaz rosado y  me deja sin poder ver nada, estoy completamente a su merced. -Papi, por favor, no lo haré de nuevo, voy a hacer lo que quieras, pero ya no me hagas esto- mi voz se quiebra y muerdo mi labio para no sollozar.  -Esto va a dolerte, recuerda, no puedes moverte-Mete su dedo en mi entrada trasera sin ninguna delicadeza, grito muy fuerte y pego mi pecho a la cama- Te dije que no te muevas-Me da una nalgada y yo me levanto, siento que mis ojos se empiezan a mojar, estoy a nada de llorar como loca-  Ahora viene la mejor parte- Introduce una cosa en punta que estaba al  inicio de la cola, literalmente ahora si soy un gato, trato de distraerme pero esto duele mucho. Escucho una cosa que vibra muy cerca de mí, no estoy segura de que sea, papi lo acerca y lo pone justamente en donde normalmente me cubren mis bragas, enseguida maulló, y también jadeo. Muerdo de nuevo mis labios para no gritar, se siente muy bien pero me sigue doliendo lo que me puso antes. -Cada vez que calles un gemido te daré una nalgada- al terminar esta frase me pega fuertemente, seguramente mi trasero esta rojo. -Ahhh, papii, ya no puedo ¡Para por favor, no puedo con esto!- Él no contesta y siento que la cosa entre mis piernas empieza a moverse más rápido- No seas malo con ahhh- No puedo acabar mi frase pues mi cuerpo se tensa y deja salir un líquido, creo que esto ya acabo pero no es así, sigue pasando esa cosa que vibra por toda mi feminidad y chillo, esto se siente mucho más intenso. -Di de quien eres bebé, hasta que no lo digas no parare con esto- frota más esta cosa en mí. -S-soy de.... ahh... de papi-apenas y termino de decir eso y mi cuerpo colapsa.  Estoy acostada boca abajo, me siento muy cansada, mis manos siguen aferradas a las sabanas, es lo único que hace recordar en donde estoy, pero puedo jurar que por unos segundos pude olvidar todo. Enseguida siento que quitan esa cosa molesta de mi parte trasera y la cosa de entre mis piernas no me di cuenta de cuando desapareció, siento como quita el antifaz, me toma de las muñecas y me sienta en la cama, él se queda parado frente a mí. -¿Con esto aprendiste algo?- Dice con una voz dura y firme, nunca me había ni hablado o tratado de esta forma, no me gusta esta faceta de papi- Joder Nina, no te distraigas y contesta lo que te estoy preguntado- él se sienta y me carga haciendo que quede sentada en su pierna. -No debo desobedecer a papi... -Se te está olvidando un detalle, no me hagas recordártelo con otro castigo- abro mis ojos como plato y niego enseguida- ¿Entonces? -No debo de gritarle a papi o acercarme a algún hombre que no sea el- todo esto lo digo viendo al piso, porque no me gusta cómo me ve tan fijamente, me arranco a llorar, no creí que me fuera a tratar así, siempre que jugamos él es muy cariñoso, me besa o acaricia mi pelo pero esta vez todo fue diferente, me toma de la barbilla y levanta mi cara, esto hace que lo mire directamente a los ojos. -Aceptare tu respuesta pero a la siguiente espero que todo me lo digas viéndome a los ojos- acaricia mis brazos y lloro todavía más fuerte- no vas a resolver nada llorando así que deja de hacerlo, carajo.  No soporto más y me levanto, voy corriendo a mi cuarto y me encierro, ya no quiero estar en esta casa, que se lo quede Sandra, Kassandra o como se llame, eso ya no me interesa. 
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD