Mario se reía con Gregor afuera de la casa, él estaba muy contento después de amar a su esposa Magda, aquel precioso momento le había abierto las puertas con su mujer.
Pero no de par en par, entre ella y él existían muchos obstáculos, estaba Douglas Turner, su padre y Tania Steymos.
Que seguía empecinada en tener un romance con él.
Cuando terminaron su juego Gregor miró hacía atrás y no viendo a nadie se acercó a su amigo Mario y le dijo a Mario: ¿Recuerdas a la niña que te dije que deseaba tener con Magda?
Sí; recuerdo que me dijiste que te has soñado con ella...
¡Existe Mario! Sé llama Camila, como mi abuela....
¿Cómo pasó?
No digo que no sepa cómo; sino cuándo, si ella se marchó de tu casa con tu hijo en brazos, muy chiquito...
Nos amamos esa noche que ella me dejó c como n
