Verónica Luego de que el deja mis labios mi respiración es agitada, el une su frente con la mía -Te deseo tanto- dice el Yo abro mis ojos y me alejo de el -Yo también lobito, pero en serio debo irme- digo -Bien, solo dame unos minutos y yo te llevo- dice el Yo muerdo mi labio inferior dudosa pero al final asiento, el ingresa a la villa mientras yo siento mi rostro ponerse más rojo que un tomate al notar a su madre en la ventana con una sonrisa Mierda debió habernos visto... Suspiro con resignación mientras espero a que el regrese, unos pocos minutos después vuelve con una muda de ropa distinta y el cabello aún mojado -Vamos- dice dirigiéndose al garage Yo lo sigo de cerca e ingresamos a este, puedo notar toda clase de autos distintos algunos de edición limitada, el coje la