—¿Y cómo fue tu noche? ¡por dios! Cuenta, me tienes ansiosa —
—Tranquila, Mel, ya te lo diré todo —
Respondo rodando los ojos, hace apenas unos minutos que Lucius me trajo de vuelta a casa, es increíble lo atento que es este demonio tan peculiar, y aunque quizás no estoy lista para una relación, se siente bien el estar tonteando con él, si, hubo más de un beso arriba de su auto, es adictivo, solo espero no parecerle fácil; camino de aquí para allá por la habitación mientras uso las toallitas desmaquillantes
—Ya suelta la sopa, por favor, Laura —
Ruedo los ojos divertida y me dejo caer sentada en la cama justo a su lado
—Pues la cena estuvo increíble ¿Sabes? Jamás me esperé que fuéramos a un lugar tan elegante —
—Jamás he ido al Upperline, pero sé que es de los mejores de Nueva Orlean
