Evite a Alonzo el resto del verano el seguía insistiendo en arreglar las cosas pero no puedo seguir con lo mismo, no es sano. Decidí enfocarme en mi mudanza, irme a otro país a vivir no es tan fácil como suena, tenía muchas cosas que organizar y mantener mi mente ocupada me ayudaba a no pensar en Alonzo. Claro que me cuestione si dejarlo era lo correcto, no me sentía para nada bien, estaba triste pero a la vez sentía como si me hubiese quitado una carga de encima. El día de partir por fin llego fui al aeropuerto privado y para mi sorpresa fuera del jet me esperaba Alonzo, salí del auto y me detuve frente a el -supe que hoy te ibas, vine a despedirme - me sorprendió ya que les pedí a mis amigos y a papá que no vinieran al aeropuerto pues se me haría más duro dejarlos, pero aquí esta el