Oxigenado Dos

742 Words
—Hola, oxigenado dos.— Minseok ignoró al joven frente a él y subió al auto. —¿Qué haces aquí? —¿Acaso no es obvio? Iré con ustedes a ver a mis tíos. —jajaja ¿Así? ¿Y desde cuándo te entró el "amor" por mis padres?—Luhan se cruzó de brazos enarcando una ceja. —Desde que ustedes dos se casaron, tan sólo digamos que quiero ver de cerca su relación así que... —Yifan hijo, ¡Qué alegría! ¿Ya te instalaste? ¿Por qué nadie me avisó que ya habías llegado?— su abuela salió y abrazó fuertemente a su alto nieto. —Acabo de llegar.— dijo alejándose de su querida abuelita.— pero ya ordené que lleven mis pertenencias a mi habitación. —Bien pensado, estoy realmente feliz de que hayas decidido vivir con nosotros.— la anciana no podía borrar la sonrisa de sus labios. —¿Qué puedo decir? Tan sólo extrañaba a mi hermosa abuelita.— Yifan miró de reojo a Luhan quién no dejaba de rodar los ojos por lo estúpido que se escuchaba su primo.— Sólo pensé que como esos dos se casaron, entonces usted estaría sola afrontando la acaramelada relación que me imagino ese par de "tortolitos" tie... —¡Minseok suelta mi cabello! —¡Devuélveme mi nutella! ¡Eres un insensible!— el más bajo no dejaba de sorber su nariz y apretar incluso más fuerte su agarre. —Por eso tú eres mi favorito.— la mayor habló dando una ligera palmada en el hombro de su tercer nieto que al igual que ella duda de la relación de esos dos, quienes con su reciente actitud les dan muchos motivos para desconfiar. —¿No que se aman?— Yifan esbozó una divertida mueca en su rostro. —¡Cállate! ¡Nadie se mete con mi nutella!— el bollo continuó luchando contra su "esposo" quién dio gracias al cielo cuando sus finos cabellos dejaron de ser maltratados. El "c***o dos" se rió internamente porque si sus "adorados" primos seguían así, entonces todo sería más fácil de lo que pensaba. Una hora después... —Terroncito de azúcar... Yifan abrió exageradamente los ojos al escuchar aquellas palabras provenir de la parte trasera del automóvil, porque...¿Acaso esos dos son bipolares? ¿Cómo puede ser posible? —Mi bombón.— Luhan acarició la punta de la nariz del bollo con aparente dulzura. —Mi dulce caramelito...— el joven matrimonio no dejaba de decirse tiernas palabras. Yifan maldecía internamente su suerte.— ¿Confundido? Todo en ellos es confuso por eso les estoy dando el beneficio de la duda.— su abuela habló antes de indicarle al chofer dónde estacionarse. Todos se bajaron y los jóvenes esposos no tardaron en sujetar sus manos y alejarse de los otros dos. —Me vuelves a llamar "Bombón" y date por muerto.— Minseok amenazó con los dientes apretados. — Cómo digas "Chocolatito".— Luhan se mofó de la cordura de Minseok quién no dudó en darle tremendo pisotón.— ¡Bollo, hijo de mi madre!— el ciervo gritó cojeando. — ¡Appa, Luhan no deja de molestarme!— Minseok se quejó ni bien llegó hacía el lugar dónde su padre estaba descansando. —¡No es cierto, él me pisó! ¡Omma, tu hijo es un abusivo! ¡Me maltrata! —¡Mientes! —¡Au! ¡Abuela!— Luhan se sobó la cabeza. —¡Ah, eso dolió, abuela!— el más bajo saltó tras recibir tremendo pellizco de la anciana. —¡Mocosos! ¡Dejen de perturbar el descanso de sus padres con sus tonterías! Ambos la miran indignados cruzándose de brazos, la anciana de encoge de hombros y voltea para mirar hacia dónde se encuentran sus hijos con una muy amplia sonrisa, saca las flores secas para dejar dos atados de rosas frescas sobre sus lápidas. Yifan se inclinó en un ángulo de noventa grados ante sus tíos que aunque ya no estén con ellos en el mundo físico, siguen siendo dignos de su respeto. —¿Han estado bien?...— la anciana fue quién habló en dirección de sus hijos quienes la dejaron hace ya diez años.— ¿No saludarán a sus padres? Tanto Luhan como Minseok se inclinaron sobre sus rodillas ante la tumba de sus padres quienes se fueron de su lado cuando ellos apenas habían cumplido catorce.  
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