—Está bien, mamá… no te preocupes. Sé que lo intentaste, y para mí también es difícil, no creas que no. —Matías lo decía en serio, para él también había sido una pequeña tortura; su problema era que Nicol se la estuvo chupando tan bien, que estuvo a punto de acabar. Eso hubiera arruinado el video—. Le pediré disculpas a la agencia alemana, y les devolveré el dinero. —Pero… eso nos va a perjudicar mucho. —La preocupación se hizo evidente en la cara de la rubia—. Además, me imagino, que tendremos que pagarles más de lo que nos dieron. Como una especie de multa. —Sí, es lo más probable; porque nos comprometimos a hacerlo… mejor dicho, yo me comprometí. Vos no tuviste la culpa. —Sí que la tuve… yo arruiné todo con Lautaro. Vos no sabías nada de eso. Tu idea fue perfecta, era una excelente f