Que Leonard la citara a medio día no le resultó para nada conveniente a Allie, pues le cortaba toda la mañana, ya que tendría que hacer el turno de tarde y probablemente el de la noche. Pero con su optimismo de siempre, decidió ver el vaso medio lleno, ya que todo lo que estaba haciendo era por su hermano y su pronta recuperación, y saber eso, la llenaba de ilusión. Se vistió con un fresco vestido verde olivo, unas cómodas sandalias, se recogió el cabello y se maquilló un poco. Tomó desayuno rápidamente y salió rumbo al hospital para llevar una muda a su madre, quien insistió en que se quedaría a pasar la noche con Timmy. Al llegar, se dirigió de inmediato a la habitación, donde se encontró a su madre sola. —Buenos días, mamá —Saludó con un abrazo y un beso—. Te ves muy cansada ¿pasaro