Emery Sabarth preguntó: "¿A casa? ¿Vamos a la Villa Moris?".
"¿Acaso quieres ir a otro lado?", preguntó Aiden.
Ella se retractó rápidamente, diciendo: "Iré adonde vayas tú, por supuesto".
Él la miró de reojo, se apoyó en el asiento y le dijo: "Es importante que de ahora en adelante recuerdes que eres la Sra. Moris y no alguien a quien se le pueda agredir sin consecuencia, ¿entiendes?".
"Sí, lo entiendo...", respondió ella.
"Yo soy la persona que está tras de ti y si alguien se atreve a agredirte, significa que me están agrediendo también", dijo el hombre.
La mujer reflexionó por un momento y preguntó: "¿Y qué pasa si el que me agrede eres tú? ¿Significaría que te estás agrediendo a ti mismo?".
Aiden le habló con un tono profundo pero hipnótico, y declaró su soberanía
