POV AURORA Me despierta la mano de Ana en mi hombro, sacudiéndome mientras la luz del sol entra a raudales por las cortinas que ella debe haber abierto, tirada a un lado de mi cama. ―Despierta, dormilona ―dice con un sonrisa―. Es el día de tu boda. ―Esas no son realmente las palabras con las que quería despertarme ―gimo, pasándome una mano por la cara. ―Lo sé. ―Ana me aparta el pelo de la cara y me mira con simpatía―. Pero al menos estaré aquí para una parte. Recogí tu vestido en el camino. Puedo verlo colgado en la puerta del armario, envuelto en el alegre portatrajes rosa y blanco de la tienda de novias. Me levanto para sentarme, cansada y dolorida por haber estado tensa toda la noche. Mirando a Ana, me pregunto qué diría si le contara lo que pasó anoche entre Luca y yo. No hay