Pov Mauro
Me despierto y me siento bastante mejor, la resaca nunca me pega tan fuerte, es una ventaja, tengo que confesar que eso que hice anoche lo he hecho bastante seguido para ser algo eventual, a veces solo quiero olvidar todo y anoche no fue la excepción. Me estiro y al abrir los ojos, la veo a ella sentada en la cama viéndome, se ve muy bonita para estar recién levantada, con que alimentaron a esta mujer que es tan hermosa.
Ahora si puedo decir buenos días— le digo bostezando, tengo sueño, fue una noche dura, creo que es la primera vez que la saludo así loco, no— ¿qué hora es?
Son las 6:30 de la mañana— por qué me desperté tan temprano y peor, por qué ella lo está desde antes— ¿cómo está tu resaca?, Mauro, te juro que me vuelves a asustar así y te mato yo misma con mis manos, no
