Las cualidades qué podía tener ese hijo, sería perfecto, tsnto los de Scarlett como mía, no sería débil en lo absoluto, de carácter duro con liderazgo como el mio, si fuera niña también sería perfecta, hermosa como su madre, elegante, dura de carácter y sobre todo sería buena para manipular a los hombres, un buen partido, un político, un magnate, había tantos puestos importante una niña me vendría bien pero me puse a pensar, ¿por qué conformarme con una niña cuando puedo tener tres o cuatro, mucho qué mejor, tendría la mejor educación para ser perfectas y deseadas por cualquier hombre, hasta la realeza an visto y se an casado con mujer de esta familia así que posibilidad había de que una de mis hijas se casen con un prince pero primero sería un primogénito varón el qué tiene que llevar mi linaje.
Ya estaba decidido hoy en la noche empezaría a procrear mis futuros hijos aunque pensándolo bien ya creo que este embarazada he estado con ella y la he llenado tantas veces de mi semilla, de solo pensarlo una sonrisa de satisfacción se dibujo en mi rostro, en unas semanas tendría la noticia de mi fruto creciendo dentro de ella pero me acordé de la fiesta, estaba programada para este fin de semana para anunciar qué Scarlett como mi esposa, tenía que ser perfecto, vestido, accesorios, tratamientos, tantas cosas debía verse espectacular, sus modales no me preocupaban era increíble su actitud de arrogancia y hermosa apariencia combinaria conmigo pero no era suficiente, mi padre tenía que quedar deslumbrado absolutamente con ella, así para que desde ese día todo ese poder este a mi nombre toda la organización y con la mia seria invencible.
La fiesta seria perfecto para muchas cosas, nuevos socios, aliados y presumir a mi hermosa mujer, tenía poco tiempo para prepararla, esos vestidos que le había comprado no eran adecuados, ya tenía algo en mente, sensual qué resaltará cada curva, exquisita figura pero no vulgar, tenía que verse recatada y fina, las joyas que convienes con ese vestido ya los tenia en mi caja fuerte, nunca creí que los sacaría y mucho menos se los daría a Scarlett pero no importaba ese dia valdría la pena, ahora faltaba que se arreglara, las uñas, que tratamientos, exfoliantes, no la iba a dejar salir es arriesgado mejor sería contratarla los servicios a la mansión, no me importaba si se tomaba todo el maldito día con esas cosas prefiero que este vigilada, ahora quedaba ir a buscarla para informarle, salí de mi despacho y fui a su búsqueda, para mi sorpresa no tarde en encontrarla en la entrada de la mansión, se reía con un hombre y eso no me gustaba, su risa es mia y nadie puede escucharla, camine con paso fuertes hasta ellos, me moría de los celos, lo iba a matar sea quien sea de seguro era uno de mis hombres.
-¿¡Que madres esta pasando aquí!?.... De que se ríen o..... Aaaaa.... Eres tu leonard-.
Aunque quisiera golpearlo para luego tirarlo en un barranco no podía , leonard es mi amigo de la infancia se podría decir, nuestras familia estan unidas desde ase muchos años, mi padre es amigo de su padre y mi abuelo con el suyo y así durante 5 generaciones más, prácticamente crecimos desde la niñez, era muy apegado pero a mi me hostigaba su presencia pero es buena persona y fiel a mi.
-"Oye amigo... ¿Cuando pensabas decirme que trajiste a tu esposa?..... Como le hiciste para conquistarla, tú... Um hombre amargado y poco romántico conseguiste a tan bella y dulce mujer.... Pasame el secreto no" -
-"¡Callate! ... Ni te atrevas a codiciar a mi mujer..... Es mia.... Si te atreves a verla de manera sospechosa te juro que te quito los ojos" -
Deje en claro que era mia, la tome de la cintura y la pegue a mi, sería mi amigo pero era hombre y cualquiera que la mirara la deseaba, eso era seguro que pensaba cosas indebidas con ella.