La noche se ha ido intentando esquivar su mano y el idiota la sostuvo. El contacto con él me tiene hastiada, respiro profundo y me preparo para el espectáculo. Subimos la escalera y al entrar al cuarto con luz estrambótica me doy cuenta de que es un mundo aparte de los socios. Hay una mesa con aperitivos, una barra con su bartender. Los socios están platicando en una esquina e Igor tiene una chica en su regazo. La música llega por unas bocinas en las esquinas, hay un cristal que te permite ver la pelea y el sitio no tiene nada que envidiar a estar abajo apretados. Dima está reunido con Vic y Hernán. Lo veo sonriendo y viendo una navaja en su mano. Hernán me sintió y conectó su mirada con la mía. El contacto de mi mano con Iván lo hizo desviar la mirada y bajó de cantazo el trago. Su barba
