—¿Una disculpa?—bramó la madre de Michael en tono de burla y también perpleja por lo que su hijo había dicho y es que no era para menos, es decir algunos meses atrás, Michael había sido el primero en repudia mi existencia, por lo que aquellas palabras de defensa sonaban extrañas en él, quizás como si estuviera bromeando.
Gire a verlo y aparentemente lo que estaba diciendo era en forma sería o al menos esa era la expresión que permanecía en su rostro.
—No pienso disculparme con ella, Michael—protesto aquella otra mujer dirigiéndole a Michael una mirada hostil, lo hubiera matado con esa mirada si tn solo hubiese podido.
—Entonces no tienen nada que hacer aquí—expresó con un tono de voz severo y al mismo tiempo desvergonzado, quizás se estaba divirtiendo con esto.
Por supuesto, yo estab
