Despierto con el brillo del sol dándome justamente en los ojos. Frunzo las cejas Y con cuidado abro los ojos, adaptándome a la luz de la habitación, los recuerdos llegan a mi mente lentamente recuerdo que ya di a luz ¡Dios ya soy madre!. Me percato de que no soy la única sola en la habitación, también se encuentra Demian en un sillón con sus manos entre lazadas, se ve cansado pero muy apacible, seguramente el pobre me cuido todo la noche y mañana. -Demian...-murmuro su nombre pero no pasa nada.- Demian...-Vuelvo a repetir.-¡Demian tengo fotos tuyas de bebé! -Frito y Demian se levanta alarmado, río por lo bajo arruga su frente.- -No me asustes con eso Emily...-Dice pasando su mano por su rostro.-¡Emily! -Asiento y él literalmente se lanza hacia mi.-Ya era hora de que despertaras pequeña..