—No tiene caso hablar contigo. Sea lo que sea que diga, siempre vas a buscar anteponer tu decisión —le dijo Altair en un tono de voz pausado—, igual al final siempre haré lo que mi conciencia me dicte —hizo una breve pausa—. Así que esperaremos a que pase el año del contrato y ahí veremos quién decide sobre mi futuro —agregó desafiante—, que te adelanto al ser una persona adulta, puedo decidir por mí misma. No pudieron mis padres conmigo y vas a poder tú que eres un recién aparecido le dijo la chica en un tono de voz bastante despectivo —le dijo esto, se giró sobre sus pies y salió de la oficina dejándolo con la boca abierta. Y no es que él no tuviera más argumentos para seguir reteniéndola en su oficina, y por lo menos, poder dar un paso para lograr lo que tanto estaba anhelando Claro qu