Como en la ocasión anterior, durante el “entretiempo” hubo un espectáculo digno de la mejor fiesta vip porno. Magdalena siguió con la mamada a su hijo, en el patio, ya sin la interrupción del televisor. Gabriela salió sorteada, de forma poco creíble, para darle el regalo navideño a su padre. Sentaron a Nacho junto a Magnus y ella se arrodilló para mostrar cómo era capaz de tragar esa enorme v***a. Al menos en parte. —Esto se está yendo a la mierda —dijo Pamela. —Relajate un poco mamá, y disfrutá… que no es nada que no hayas visto antes —las palabras de Brisa despertaron dudas en los presentes, pero nadie dijo nada. —Entiendo que es un juego peligroso —dijo Lourdes—; pero la idea es pasarla bien por una noche. Creo que podemos permitirnos algunos excesos. ¿Te ayudaría a disfrutar más si