A tu lado.

2728 Words
Giro la plumilla roja entre mis dedos, distraído. Sé que Wayne da vueltas por el camerino y que no deja de cambiarse la camisa, pero no causa gran impacto en mí porque lo único que hago es pensar. Recuerdos de mi infancia y adolescencia llegan a mí a montones; y todo lo que recuerdo es que soñaba, muy en el fondo, con esto: un gran escenario y un público esperando. Y pasó. En un par de horas saldré al escenario de un modesto auditorio que vendió todas las entradas. Es curioso, pero no estoy nervioso. Siento que lo haré, que toda mi vida me había preparado para esto, sólo no estaba dispuesto a buscarlo antes. —Mat —llama Wayne; señala mi teléfono sobre la mesita—, te están llamando. Ah, sí. Mi hermana quiere hacer una videollamada, ya van varias veces que mi familia me llama y eso me gusta, aunque no pudieron estar aquí, están al pendiente de todo momento. Respondo y hablo con ella y su familia durante un rato; ellos están más nerviosos que yo. También hablo con mi papá, con mi mamá y con algunos amigos; hasta que llega Sebas y salimos del camerino. Tras bambalinas, Taylor nos reúne a todos. — ¿Están listos? —pregunta con energía—. Allá afuera las butacas ya se están llenando y la gente espera para verlos. Este es el momento del resto de sus vidas. Disfrútenlo, chicos, porque todo podría cambiar esta noche. —Gracias, Taylor —dice Sebas con solemnidad—. Gracias por la oportunidad y la confianza. —Sé que no me voy a arrepentir. —No lo harás. —Disfruten un poco más y vayan con vestuario, tengo que ir a hablar con algunos directivos. Wayne sólo espera que Taylor se dé la vuelta para gritar y agitar el puño al aire. — ¡La estamos rompiendo! ¡Estamos a nada de hacer una locura! — ¿Necesitas ir al baño antes? —bromea Tris—. Sólo… tranquilicémonos y confiemos en nosotros. Kat llega corriendo hasta nosotros con una camiseta con nuestras caras impresas, lo cual es muy vergonzoso. Los chicos comienzan a hablar de algo que me pierdo, tratando de mantenerme tranquilo y sereno para el momento de salir a tocar como nunca en mi vida, pero, sobre todo, disfrutarlo. Al poco tiempo Dave llega y se integra a la conversación, no lo tomo mucho en cuenta hasta que se dirige a mí específicamente. —No has dicho mucho —dice—. Normalmente siempre estás al pendiente de estas cosas. —Creo que estamos listos. —Me encojo de hombros, tranquilo—. No vale la pena preocuparse, practicamos mucho para este día. —No han llegado las chicas. Necesitamos hablar de Issa. — ¿Le pasó algo? —le pregunto, preocupado por primera vez en la noche—. ¿Está bien? —Está bien, güey. Sólo da la casualidad que escuché una conversación por accidente. —Las espiaste —adivino, divertido. —Fue un accidente. —No le creo—. Bueno, da igual. El punto es que esa conversación fue sobre ti. —Mientras escucho lo que Dave me dice, no paro de pensar en lo equivocado que estaba con Issa—... Así que… creo que debes pensar si quieres convertirte en el mejor amigo solamente o mover tus cartas. Yo creía que estaba procurando la paz de Issa, pero resulta que no soy así, que yo soy la persona que monta cumpleaños sorpresa y no me importa mucho si la chica tiene novio o no; soy la persona que la besa sin pensar y la persona que no respeta mucho las reglas; y a Issa le gusta esa persona. —No mames, güey, puta madre —digo en español—. No sabes las putas ganas que traigo con Issa, pero no quiero verme como un cabrón o hacer algo que ella no quiera. —Supongo que lo quiere. O ella dará el primer paso, ya sabes lo que dijo. —No puedo dejar que en un futuro me recuerde como el cobarde que no dio el primer paso, ¿cierto? —No, claro que no. Ella ya me invitó a la primera cita—. Mira que yo me estaba conteniendo, pero se acabó. Llevo más de un año esperando esto. Un año esperando por ella, por poder amarla libremente. —Bueno, supongo que será un buen detalle que te declares el día de San Valentín. Me río. —Güey, declarar suena como si tuviéramos quince años. Mierda, ya llegaron. —Señalo con la cabeza hacia donde los chicos se reúnen e Issa y April saludan a todos tras su llegada. Palmeo a Dave en la espalda—. Vamos. Tengo que hablar con Issa. Camino con decisión hasta las chicas y no me molesto en ocultar la ferocidad con la que me siento. —Hola —saludo a Issa colocando de forma suave mi mano en su espalda baja. —Hola —dice con alegría—. ¿Nervioso? —No tanto, pero necesito hablar contigo ahora —afirmo, sin miedo y sintiéndome más como yo mismo. —Eh…, está bien —dice extrañada. Señalo con la cabeza una de las habitaciones más cercanas para tener un poco de privacidad—. Oh, vaya, parece algo serio. ¿Estás bien? Cierro la puerta detrás de nosotros y sonrío, con el corazón martillándome el pecho. —No, no está bien. Porque de repente me he convertido en alguien más de palabras que de hechos y yo no soy así. — ¿Eso qué…? Doy tres zancadas hasta ella en cuestión de milésimas de segundo y… la beso. El beso que estuvimos esperando por tanto tiempo. Una de mis manos la pongo en su mejilla y la otra en su cintura para atraerla a mí. El primer beso se siente inseguro, debo admitirlo, creo que la tomo por sorpresa, pero le doy un segundo para pensarlo. —Si no quieres, este es el momento para decirlo —hablo contra su boca, rogando porque no impida esto. Issa no responde con palabras, sino con hechos. Pone sus pequeñas manos sobre mi camisa y las hace puños para jalarme hacia ella con urgencia. Y entonces, ese beso que comenzó siendo tímido se vuelve de fuego. Me consume como si estuviera arriba del escenario vibrando con la música, viviendo cada segundo como si fuera el último, y luego, una vez más que sus labios tocan los míos, muero lenta y deliciosamente. Necesito respirar porque siento que podría arder en cualquier momento, sin embargo, después de besarla… si dejo de hacerlo, no creo que la vida se viva igual que antes. Sus movimientos, sus texturas, sus sonidos y su olor son algo que ansiaba conocer. Justo ahora siento que podría hacer cualquier cosa. —Estás fueron muy buenas acciones —dice Issa con la respiración entrecortada y los labios hinchados. —Sé que me tardé —admito sin dejar de abrazarla—, pero tenía miedo de hacer algo que te asustara. Sé que no eres de cristal, eres feroz y debí darme cuenta de que si hacía algo mal me lo dirías, debí entender que no quieres que esto sea perfecto, quieres que sea real. —Exacto, quiero que seas tú, Mat —pide; sus ojos brillan—. Nos vamos a equivocar, pero lo vamos a hablar y lo vamos a resolver. Le sonrío y le doy un beso corto, sólo por el placer de hacerlo. —Hace mucho que no hago esto, pero… ¿Quieres ser mi novia, Issisita? —Issa ríe y ladea la cabeza—. ¿Me harás rogar? —Sí, creo que sí. —Me río y finjo ofenderme; la suelto y comienzo a hincarme—. ¡No! ¿Qué haces? ¡Es broma! —Toma mis manos y continúa riéndose—. Quiero ser tu novia, siempre he querido. Levanto los brazos en señal de triunfo. ¡Cuánto nos costó llegar hasta aquí! Tomo su rostro entre mis manos y la beso nuevamente; nunca parece suficiente. —Me gustaría quedarme aquí toda la noche, pero tengo que salir —lamento. Y realmente lamento que haya gente esperando por escucharme tocar—. ¿Estamos bien? —Más que bien —asegura. Salta a mi cuello y la atrapo antes de que nos caigamos los dos. Me río con ella y siento que la noche saldrá bien, pase lo que pase, todo estará bien. Salimos de esa habitación y nos reunimos con los chicos. Issa se va al lado de April, y Dave me mira con interrogación; sólo me encojo de hombros. —Chicos, necesitan alistarse —informa alguien del sonido—. Salen en diez minutos. Kat, Dave y April comienzan a irse, pero Issa se rezaga un poco para hablar conmigo unos segundos. — ¿Cómo te sientes? —Bastante tranquilo —respondo. Meto la mano en el bolsillo de mi pantalón y le muestro la plumilla roja que una vez me regaló—. Me siento con suerte. —No la necesitas —asegura—, pero es bueno que la tengas. Yo también traje algo… —Comienza a buscar en la pequeña bolsa que trae colgada al hombro y saca una servilleta perfectamente doblada—. Presiento que muy pronto firmarás muchas más de estas. Al inicio no sé de lo que habla, pero luego desdobla la servilleta y suelto una carcajada al ver el autógrafo que le firmé como broma la noche que nos conocimos. —No puedo creer que guardaras eso —digo muy feliz, pero también sorprendido. —Estoy esperando que te vuelvas más famoso para venderla por internet —bromea. Sonríe y logra que calme cualquier dosis de nervios que pudiera tener—. Ya me voy, no quiero distraerte. Asiento y le doy un beso en la frente mientras la abrazo. —Suerte, Mat. Naciste para esto. — ¡Mat! —me grita Tris. De forma efusiva, le doy muchos besos cortos a Issa, esperando que esta extraña e increíble sensación me dure lo suficiente para tocar toda la noche. Voy hasta donde a la banda ya les están poniendo los audífonos monitores y dando los últimos detalles para salir al escenario. Wayne está que no puede contenerse y se va a cagar. —Lo haremos bien —asegura Sebas—. Sólo hay que hacer lo que siempre hemos hecho: darlo todo en el escenario. —Sé que ya tenemos un repertorio —interrumpo—, pero… me gustaría empezar con By your side. Entiendo que no puedo estar haciendo esto y… —Los vimos —interrumpe Wayne con una sonrisita molesta—. A ti y a Issa. Por eso la canción, ¿no? —Podemos cambiar el repertorio —asegura Sebas, sonriendo de la misma forma molesta que Wayne. — ¿Le escribiste la canción a Issa? —pregunta Tris con curiosidad. —Sí, es para ella. Y por primera vez lo admito en voz alta porque por fin puedo amarla con libertad y con la tranquilidad de saber que cualquier cosa es recíproca. —Chicos, es hora —nos informa sonido—. Comiencen a salir. ¡Hey! Dales su micrófono a cada uno. Vamos, vamos, vamos. Pongan la entrada. Los nervios comienzan a llegar, pero me mantengo tranquilo mientras subimos al escenario y el auditorio entero se llena de voces gritando. No reconozco nada, las luces son demasiado intensas y las personas parecen demasiado pequeñas, la música es atronadora, el escenario muy imponente. — ¡Muchas gracias a todos por estar aquí! ¡Esto es un sueño y qué mejor que en el día de los enamorados! —dice Sebas. Y el público nos recibe de buena manera. — ¡Esa es la actitud! —agrego. Trato de buscar entre el público la zona VIP donde sé que está Issa, pero no logro visualizarla con claridad—. Con la banda habíamos planeado un repertorio —continúo—, pero… el día de hoy me siento inspirado y… quiero cantarle una canción muy especial a una persona aún más especial. —El público grita con emoción—. Y también quiero invitarlos a cantar con nosotros —Continúo mientras me paso al piano listo para mí y Sebas me ayuda a acomodar el micrófono—. Esto es By your side. Y te aseguro que esta vez me quedaré a tu lado mucho tiempo —digo sólo para Issa—. Feliz San Valentín a todos. Entonces… mis dedos se deslizan por las teclas del piano con tanta facilidad y familiaridad que no siento que haya dejado de tocar esta canción hace tiempo, de hecho, es como si siempre lo hubiera estado esperando. Ahora que todo ha caído en su lugar, está canción se siente como lo correcto. En el futuro recordaré la primera presentación de Red Crossroads como un montón de luces y gritos a mi alrededor, con la mente muy nublada por la emoción, pero con la tranquilidad de saber que estaba haciendo lo que amaba con algunas de las personas que más quería. --------------- — ¡Por Red Crossroads y lo que está por venir! —grita Taylor. Elevamos las copas de champaña en el aire mientras las personas gritan y celebran a nuestro alrededor. Siento muchas palmas de personas desconocidas y de los amigos cercanos que invitamos a la fiesta luego del concierto. Nuestra música suena de fondo en la sala privada de la Taylor´s records y hay muchas conversaciones perdidas y personas hablando sobre nuestra presentación el día de hoy. —Pareces distraído. Me giro hacia Issa a mi lado, quien me sonríe mientras le da un sorbo a su copa. —Sólo... trato de concentrarme en lo importante —respondo—. Ven, tomemos un poco de aire. Caminamos juntos entre las personas que intentan saludarme y otras tantas que nos ignoran. — ¿Nos iremos de la fiesta? —pregunta cuando llamo al elevador. —Regresaremos en un rato —prometo—. No se darán cuenta. —Eres una de las estrellas, claro que se darán cuenta. El elevador se abre en nuestro piso cuando aún me estoy riendo; presiono el último botón. — ¿Cómo estuvo la presentación? Tienes que ser honesta. —Mat, por favor… —Se gira hacia mí y me mira de forma severa—. Estuviste increíble, debes tener más confianza en lo que haces y dejar de ser tan modesto, felicítate y siéntete orgulloso. Yo lo estoy, estoy orgullosa de ti. El elevador se abre en el helipuerto del edificio y un viento frío nos recibe. Caminamos hasta la orilla y nos quedamos en silencio mientras observamos los rascacielos iluminados y las nubes grises sobre ellos. —Nunca pensé que fuera a conseguir esto, pero es gracias a ti —aseguro—. Me removiste una gota de mi orgullo y me hiciste ver que me estaba conformando. Gracias por eso. —Nos hemos ayudado mutuamente, somos un buen equipo. Pronostico que el futuro será así para nosotros. — ¿Así… cómo? —pregunto interesado. —Nos impulsaremos —asegura con una sonrisa—. Te diré cuando falles y te alentaré a ser mejor, y tú lo harás conmigo. Cada uno brillará con su propia luz y lo haremos bien, excelente, de hecho, pero… cuando estemos juntos siempre me compartirás un pedazo de ti y yo de mí. Me inclino para besarla lentamente, tomándome el tiempo justo para saborear sus labios y escuchar su respiración entrecortada. —Issa…, no sé lo que venga a partir de ahora —digo con nerviosismo—, lo único que sé que no quiero perder una vez más es a ti. No te prometo perfección ni salidas románticas cada semana porque sabes que no soy muy bueno en ello… —Se ríe— pero te puedo prometer respeto, confianza y amor. —Y yo te prometo apoyo —continúa con solemnidad—, amistad, amor y honestidad. Gracias por esperarme y por siempre entenderme. —Tenemos mucho camino por delante juntos, ¿no? —Eso depende de que lo mantengas interesante —bromea. — ¡Ah! Ya veo… Me inclino hacia ella… ISSA Y MAT SALIERON ADELANTE. FIN.

Great novels start here

Download by scanning the QR code to get countless free stories and daily updated books

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD